Los antidisturbios han tenido que cargar esta mañana contra los trabajadores del metal que protestaban ante la sede de la Confederación de Empresarios de Cádiz. Los manifestantes comenzaron a lanzar huevos y tomates a la fachada del edificio Ma'arifa, donde radica la CEC, lo que propició la drástica intervención policial. La bronca ha durado casi una hora y los agentes se han empleado lanzando pelotas de goma.
Más de 10.000 trabajadores gaditanos del sector del metal están llamados a la huelga convocada para las jornadas de este martes y el miércoles, ya que patronal y sindicatos no han conseguido alcanzar un acuerdo sobre el convenio colectivo en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) celebrado este lunes en la capital.
Según ha explicado el Sindicato Provincial de Industria de CCOO en Cádiz en un comunicado, este paro es la consecuencia de la "intransigencia de los empresarios del sector con su pretensión de retroceder en las condiciones laborales de los empleados, bajo el paraguas de la reforma laboral".
CCOO ha asegurado también que en el encuentro de este lunes se ha presentado una nueva propuesta desde la representación de los trabajadores "más flexible", pero que la patronal "se ha negado a aceptar".
