“La Universidad de Cádiz es una universidad de la sociedad”. Con esa mentalidad y con la única visión de trabajar por “lo más beneficioso” para la ciudad, el rector de la UCA, Eduardo González Mazo, casi se despide de su gestión al frente de la institución académica, con la firma de la formalización de la concesión administrativa que concreta el convenio de afectación temporal de uso suscrito dentro del Protocolo General de Actuación, rubricado entre ambas instituciones el pasado mes de junio de 2018 para el impulso y desarrollo de la estrategia de fortalecimiento del campus universitario y cultural de la ciudad de Cádiz.
Todo por el corredor universitario y con tono de despedida, tanto el alcalde de Cádiz, José María González, como el máximo dirigente de la institución académica, agradecieron el buen clima de negociación entre ambos, con un proyecto que iba más “allá de los intereses académicos. Ha tenido a Cádiz en la cabeza y el corazón”, aseguraba el regidor gaditano.
El documento suscrito permite la permuta de la sede actual del Rectorado de la UCA (ubicado en calle Ancha, 16) a favor del Ayuntamiento de Cádiz y del Centro Cultural Reina Sofía (Paseo Carlos III nº 9) a favor de la Universidad de Cádiz para que, conservando su denominación y afectación, sea la sede del Rectorado durante un plazo de 50 años. El Ayuntamiento mantendrá en planta baja un espacio para exposiciones culturales, como es el caso de la Fundación Federico Joly Höhr, y se compromete a la búsqueda de una sede a la Real Academia Hispano Americana de Ciencias, Artes y Letras. “Lo que se firma es un compromiso de ciudad, que espero que quienes no lo aprueban puedan ir viendo sus bondades con el paso del tiempo”, agregó el rector.
Además, el convenio incluye las normas reguladoras del uso y de funcionamiento del Centro Cultural Reina Sofía. Como consecuencia de las mutaciones demaniales previstas de ambos edificios y en atención a la diferencia entre los cánones concesionales, resulta un saldo a favor del Ayuntamiento de Cádiz de 1.012.937,63 euros de acuerdo con los informes de valoración técnica suscritos de común acuerdo por los técnicos de ambas administraciones. Esta cantidad, como estaba previsto, será abonada al Ayuntamiento por la UCA en concepto de canon concesional prepagable por todo el periodo de la concesión. Dicha cantidad irá a parar al Teatro Pemán, que ya tiene el proyecto técnico “elaborado y aprobado y al que tan sólo le faltaría la licitación”. El sentido del alcalde está en “conseguir dinero” para poder actuar y convertirlo en el paraninfo de la Universidad gaditana, dotándolo de vida con actividades culturales y universitarias.
Toda la tramitación tiene como objetivo la consolidación del campus universitario, dentro de ese “empecinamiento de la ciudad para conquistar su propio futuro”; así como la “dinamización económica de la ciudad en zonas como La Viña, el Mentidero o El Balón”. Aunque ha sido “un camino complejo y difícil con problemas que hemos ido solventando” confía en que repercutirá en la prosperidad de la ciudad.
Por su parte, el rector de la UCA agradecía la labor de técnicos y políticos tanto del Gobierno local como de la oposición, donde nombró al socialista Fran González.
Ahora lo que toca, dentro de todo el procedimiento, además de la mudanza del Rectorado al Reina Sofía, donde se está “pendiente de las órdenes de Cultura para poder llevarlo a cabo cuando estimen conveniente, desde el Ayuntamiento se trabaja en la consolidación de la modificación de crédito y la compensación de la UCA para actuar en el Pemán, así como la puesta en marcha del traslado de Ciencias de la Educación a Valcárcel, donde hay que dirimir la situación entre Ayuntamiento de Cádiz, Zaragoza Urbana y Junta de Andalucía. Mientras que las instalaciones deportivas en el Campus de las Balas “irá en paralelo al desarrollo de Educación en la ciudad”.
El protocolo para el fortalecimiento del campus universitario entre el Ayuntamiento y la Universidad de Cádiz para el desarrollo de la ciudad implica, por tanto, una serie de actuaciones que se suman a las ya emprendidas por la UCA en los últimos meses: la construcción y puesta en funcionamiento en este curso 2018/19 del nuevo Colegio Mayor Universitario, la construcción del Centro de Transferencia Empresarial El Olivillo (cuya obra se encuentra ya en su fase final), así como el traslado de la Facultad de Ciencias de la Educación a Cádiz (tras la cesión del inmueble a la UCA por parte de Diputación en diciembre de 2017 y cuya licitación del proyecto de obra se encuentra en estos momentos en los últimos pasos previos la adjudicación).
Nuevos estudios
Sobre el nuevo estudio de grado de Bellas Artes en el campus gaditano, el actual rector de la Universidad explicó que con la crisis, que era financiera, se ha sufrido una crisis que ha afectado al conocimiento y “no se ha puesto en marcha ningún título ni grado en el entorno universitario. No obstante, desde la UCA se presentó la propuesta de Bellas Artes y Comunicación Audiovisual, y en medio de toda la maraña electoral y cambios de gobierno, se les rechazaba la propuesta a expensas de que se aprueben los presupuestos, puesto que “no hay problemas ni académico ni de diseño.
González Mazo defendió la presencia de Bellas Artes en Cádiz, y lo acercó al ámbito del Carnaval, con el que mantiene una “relación directa. Con Bellas Artes se cerraría el campus, se posibilitaría no sólo un sistema eficiente, sino también universal, donde deben transmitirse los conocimientos”.
