Considera que el exalcalde de Algeciras "tenía el poder suficiente para amañar el concurso", que tuvo una valoración incluso "grosera"
Un agente que investigó el denominado caso Madeja ha afirmado "sin ninguna duda" que hay evidencias que conducen a pensar que la empresa Fitonovo pagó las obras en la sede de la agrupación socialista Macarena, en Sevilla, aunque en realidad se facturaron a nombre de una mercantil dedicada a la desratización.
Su testimonio ha sido uno de los que ha escuchado este lunes el tribunal de la Audiencia Nacional que juzga las presuntas adjudicaciones irregulares a Fitonovo en los Ayuntamientos de Sevilla y Algeciras entre 2004 y 2011 a cambio de supuestas comisiones o regalos a altos cargos y funcionarios municipales. Un procedimiento en el que el PSOE e Izquierda Unida figuran como partícipes a título lucrativo.
El pago de las citadas obras es una de las claves por las que la Fiscalía cree que el PSOE podría haber obtenido provecho de la trama investigada al sospechar que Fitonovo habría abonado 6.839,36 euros de estos trabajos "en compensación a la adjudicación de distintos contratos públicos" por parte de altos cargos del Ayuntamiento de Sevilla, entre ellos Domingo Enrique Castaño, ex asesor del grupo municipal del PSOE; y el exedil Manuel Gómez Lobo, dos de los acusados que han admitido los hechos objeto de acusación.
Uno de los agentes de la Guardia Civil que investigó el caso ha concluido que toda la documentación que han analizado "apuntala" que esas obras se habrían pagado por Fitonovo, aunque las facturas estuviesen a nombre de otra empresa, Klevin S.L., dedicada a la desratización.
La facturación a nombre de esa tercera mercantil perseguiría, ha explicado el testigo, "enmascarar esa operativa y que no figurara Fitonovo", que era contratista con el Ayuntamiento de Sevilla y que fue la empresa que, según su testimonio, habría pagado realmente a los trabajadores que hicieron las obras.
Igual de categórico ha sido el agente al afirmar que "todos los elementos" de la investigación "apuntan a Diego Sánchez Rull", exalcalde del municipio gaditano de Algeciras, como la persona que recibió una comisión a cambio de la adjudicación de la construcción de un polideportivo cuando él era delegado de Construcción y Urbanismo, en 2010.
"No tiene sentido que se pague a otra persona. Diego Sánchez Rull es la persona indicada y la que tenía el poder suficiente para amañar el concurso", ha indicado para después señalar que en dicho concurso hubo "multitud de criterios" que se valoraron "de forma totalmente subjetiva" e incluso "grosera".
En su declaración como acusado, Diego Sánchez Rull negó de forma categórica haber recibido 148.000 euros de comisión por parte de dos empresas -una de ellas Fitonovo- en el marco de la adjudicación de ese concurso.
Durante la jornada de este lunes, diferentes agentes han explicado que Fitonovo tenía una caja b -ya acreditada en sentencias sobre otras piezas del caso Madeja- que se nutría de facturación falsa y de donde saldrían las presuntas mordidas pagadas a cargos públicos