La Policía Local detuvo este domingo 14 de febrero a un joven de Chiclana por presuntos delitos contra la seguridad vial y desobediencia grave. Los hechos ocurrieron poco antes de las 7.00 horas, cuando una patrulla de agentes en servicio de vigilancia de población por la carretera de la Barrosa, a la altura de la zona del Campito, se cruzaron con un turismo con la rueda trasera izquierda reventada. De inmediato, los agentes, haciendo uso de los dispositivos luminosos y acústicos del vehículo policial, le ordenaron el alto, sin conseguirlo, ya que el conductor continuó la marcha hasta la entrada al garaje de una urbanización cercana, donde se detuvo.
En ese momento los agentes se bajaron del vehículo y se dirigieron al conductor a través de la ventanilla, ignorando sus indicaciones y accionando la apertura de la puerta automática de acceso a los estacionamientos. Además, aceleró repentinamente el coche, teniendo que apartarse los policías para no ser atropellados. Una vez detuvo el turismo, de nuevo los agentes se dirigieron a él, adoptando una actitud chulesca y desafiante, además de mostrarse poco colaborador, no atendiendo a los requerimientos de los intervinientes y ordenándoles que se marcharan del lugar.
Cuando procedieron a su identificación, los agentes observaron que presentaba fuerte olor a alcohol y dificultad en el habla, por lo que se requirió la presencia del grupo de Atestados de la Policía Local, a los efectos de practicar las preceptivas pruebas de detección alcohólica. Sin, embargo, el conductor mostró su negativa de forma abierta y rotunda a someterse a las pruebas, siendo informado claramente de que dicha negativa constituía un delito. En vista de la negativa y de la sintomatología, se procedió a la detención de J.A.M., de 27 años, con domicilio en la ciudad, como responsable de dos presuntos delitos contra la seguridad vial y otro presunto delito de desobediencia grave.