Dos caras, doble personalidad, imagen dual... Califiquen como quieran a un Sevilla que todo lo bueno que demuestra ser en casa lo echa por tierra cuando juega lejos de Nervión. Es un equipo de película con un actor principal, su entrenador, que en términos futbolísticos padece en su interior el síndrome del ‘Dr. Jekyll and Mr. Hyde’.


Míchel y los suyos tienen peligrosamente dos caras muy dispares. Si en el Pizjuán han sumado hasta la fecha 13 puntos en 6 partidos, como visitante ha obtenido la escalofriante cifra de 5 puntos en 7 jornadas disputadas. O lo que es lo mismo, 1 victoria, 2 empates y hasta 4 derrotas. Además, consuma los desastres en campos este año a priopi asequibles como en Vigo, Zaragoza o Bilbao. Y para una visita dura que tiene que lidiar coge y sale goleado del Calderón. Pero si analizamos los puntos rascados en pobres empates vemos que ambos fueron logrados en Granada y Vallecas.


De tal forma, no es para menos que el técnico ya camine por la cuerda floja de un club que no encuentra el remedio desde hace unos años en la figura de los entrenadores. Es que este Sevilla hace importante al propio Marcelino, que por estas alturas sumaba  21 puntos y aunque no ganaba en demasía como visitante es cierto que tampoco perdía. Sumaba 8 puntos lejos del Pizjuán (1 victoria, 5 empates y 1 derrota).


Pero la historia aún preocupa más al míster madrileño. En puntuación pasa a ser, según la jornada 13, el 8º peor Sevilla desde que regresó del infierno de la Segunda. Sólo los tres primeros años con Caparrós y aquel de la 2007/08, que padeció la triste pérdida de Puerta, además del adiós de Juande Ramos en la jornada 8, andaban peor que los de Míchel (17, 11, 15 y 14 puntos, respectivamente).


Aunque el guarismo que entierra al actual técnico es la relación de partidos como visitantes en estas 12 temporadas. Ya es el segundo peor en 7 choques jugados fuera casa. Sólo superado por el citado de la 2007/08, que sumaba un punto menos (4). Peligrosa cifra para el futuro de Míchel.

 

Cinco puntos a domicilio

Una victoria y dos empates, la cosecha lejos de Nervión, convirtiéndose en el segundo peor Sevilla desde el retorno a Primera.

 

Tres puntos sumaba más Marcelino

Tanto en la puntuación total como en las cifras obtenidas de visitante en siete partidos. Marcelino sumaba más.