El líder del equipo ha tomado el mando de la nave sevillista y está dispuesto a sacrificar su físico por lograr el objetivo europeo en este arreón final. “Después de la victoria, me encontré muy bien. Tenía un poco de dolor, pero queda sólo un mes de competición y hay que darlo todo ahora y apretar. El dolor está ahí; después tendré tiempo para descansar y recuperarme bien”, afirmó a los medios del club Ivan Rakitic.
La mejor noticia no es que hubiera llegado a tiempo el domingo para disputar el duelo ante el Espanyol, sino que el croata haya asumido de pleno su rol porque es, sin lugar a dudas, el mejor baluarte que tiene este Sevilla para acometer el asalto a competición europea.
“Tenemos una plantilla muy buena, es una oportunidad y con tres puntos en Málaga estaremos más cerca. Lo más importante es llegar a Europa, no me importa el puesto”, puntualizó Rakitic.