Muestra de que la Segunda es tan exasperante como poco vistosa, es la actual tesitura del Betis en la clasificación actual de la Liga Adelante, donde el conjunto verdiblanco, después de dar otro zapatazo de cara a obtener el anhelado ascenso a la Primera División, todavía debe seguir remando hasta alzarse con la distancia suficiente como para que los de Mel certifiquen el propósito común.
Vacío de fútbol (sobre todo fuera cuando toca salir fuera) pero con una pegada ante el gol encarnada en Rubén Castro y Jorge Molina; que acumulan entre ambos 38 tantos (23 del canario y 15 del alcoyano) que complementan las intervenciones claves de Adán bajo los palos, el Betis arrancó tres puntos frente al Alavés en Mendizorroza para completar un mes de abril inmaculado y pleno de triunfos a siete jornadas de terminar la competición regular.
En suma, los resultados del fin de semana han dado otro empujón más a los pupilos de Mel, distanciados ya en ocho puntos sobre la tercera plaza, en estos momentos ocupada por el Sporting de Gijón, después de que los asturianos no pasaran del empate en Palamós contra la Llagostera.
Y es que el conjunto bético ha igualado el registro del Eibar del pasado curso (71 puntos), con partidos por delante para superarlos.
Mención especial también para el actual técnico verdiblanco, tras el cinco de cinco obtenido este sábado, números que baten el récord de victorias consecutivas que poseía Merino y el propio Mel como entrenador del Betis.
Repaso del Betis B al Lucena (6-0)
Después de 45 minutos sin que nadie pudiese perforar la meta contraria, una lluvia de goles en la segunda mitad de los de Merino, provocó que el Lucena saliese de la Ciudad Deportiva Luis del Sol con una soberana paliza, a raíz de los tantos que los verdiblancos endosaron a su rival, dos de ellos de Álex Alegría; más los cuatro que se repartieron entre Caro, Álvaro González, Rafa Navarro y Juanma.