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Nervión quiere Champions (2-0)

La resaca europea y la de Feria, insuficientes para que los hombres de Emery no doblegaran al Rayo con goles de Iborra y Carriço

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Objetivo cumplido antes de jugar. Once clasificaciones europeas en las últimas doce temporadas, pero es que además este Sevilla tiene hambre de Champions.


Con varias novedades se presentaba el Sevilla de Emery ante su afición tras la última gran gesta europea. Sin Vidal, M’Bia, ni Bacca, que descansaron, y sin Vitolo ni Beto, ambos lesionados. Además de Nico Pareja, que fue homenajeado por todo el estadio antes del inicio.


Encuentro sin demasiados altercados ni sustos contra la meta de Sergio Rico. Eso sí, con un Rayo que como acostumbra con Paco Jémez al frente saltó al tapiz nervionense con el objetivo claro de hacer fútbol y lanzarse al ataque. Así llegarían las primeras del partido para el cuadro madrileño, primero en las botas de Kakuta en el 6, al que tuvo que responder con una notable intervención Sergio Rico, y un minuto después con Quini como protagonista. Pero el Sevilla tomó rápidamente la batuta y se lanzó a por un Rayo que atrás es muy frágil. Así llegó el primero de la tarde en las botas de Iborra, que aprovechó en el minuto 17 una gran triangulación entre Diogo y Banega para cruzarla con la izquierda, lejos del alcance de Toño.


Todo de cara a las primeras de cambio para el equipo de Emery que tuvo todas las facilidades de su rival para ampliar el luminoso. Gameiro y Carriço probaron fortuna, hasta el central luso en el 43 atinó de cabeza a rematar al fondo de las mallas un centro templado de Denis Suárez.


El 2-0 antes del descanso dejaba el encuentro sentenciado y aún con 45 minutos por delante para ver a Deulofeu y al gallego Iago Aspas. Pero al que se vio en la segunda mitad fue al Rayo ante un Sevilla relajado. Los de Jémez lo intentaron varias veces, como en la doble de Aquino en el 62 o el cabezazo de Kakuta en el 73, clarísima. Pero Rico y la fortuna no permitieron que los vallecanos recortaran distancias en el tramo final del duelo ante un Sevilla que suma y sigue como local y que, evidentemente, no se va a conformar con la quinta plaza ni con la Europa League.

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