Según la Agencia Meteorológica de Japón, en la provincia de Iwate el seísmo tuvo una intensidad de 5 en la escala cerrada japonesa de hasta 7, centrada en el alcance del temblor en lugar de su intensidad.
El epicentro del terremoto se situó a 40 kilómetros de profundidad muy cerca de la costa de las provincias de Iwate y Miyagi, dos de las más afectadas por el gran seísmo de 9 grados Richter y el tsunami del 11 de marzo.
Desde aquel seísmo se han producido más de 800 réplicas, de las que tres superaron los 7 grados en la escala Richter, más de 60 los 6 grados y unas 350 los 5 grados.