El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que, aunque la mejora de las cifras macroeconómicas "aún no llega en su plenitud a la vida diaria de los españoles", es de esperar que cuando acabe 2013 "el número de parados registrados en los Servicios Públicos de Empleo será inferior al del año pasado", algo que no ha ocurrido desde 2006.
"También los datos de afiliación a la Seguridad Social permiten avanzar que en pocos meses el número de cotizantes volverá a crecer de forma consistente", ha añadido, para apostillar que "el año que viene habrá menos personas en paro y más trabajando y cotizando a la Seguridad Social".
Así lo ha indicado en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, en la que ha hecho un balance del año 2013 y ha avanzado que 2014 será el del inicio de la recuperación.
"Hace un año dije que 2013 iba a ser muy duro, sobre todo en sus primeros seis meses, pero también que las cosas empezarían a mejorar en la segunda mitad. Pues bien, los hechos nos han dado la razón".
Con este aval, el jefe del Ejecutivo ha recalcado que la OCDE ha realizado una valoración "muy positiva" de la reforma laboral, y también ha manifestado que si la inflación sube sólo unas décimas al cierre del año "será bueno para los pensionistas", que en 2013 vieron incrementada sus prestaciones ligeramente.