El portavoz de CiU en la Comisión para el Estudio del Cambio Climático del Congreso, Martí Barberá, ha tenido que abandonar este jueves la tribuna del hemiciclo mientras estaba interviniendo al sentirse indispuesto presumiblemente por una bajada de tensión.

   Barberá estaba defendiendo la postura de su partido en el debate de totalidad del proyecto de ley de Parques Nacionales cuando ha empezado a sentirse mal, incluso teniendo dificultades para poder continuar con su alocución.

   El propio diputado catalán se ha dirigido en ese momento a la Presidencia de la Cámara Baja, ejercida en ese momento por la vicepresidenta tercera, la 'popular' Dolors Montserrat, comunicándole cuál era su situación.

LE HARÁN PRUEBAS MÉDICAS

   Enseguida, ha abandonado la tribuna y ha salido al pasillo que rodea el hemiciclo, donde rápidamente ha sido atendido por los servicios médicos de la Cámara para comprobar cuál su estado y hacerle unas pruebas médicas.

   Al ser informado de lo sucedido, el presidente del Congreso, Jesús Posada, que se encontraba en esos momentos en los pasillos, se ha acercado inmediatamente a interesarse por su estado de salud comprobando que no era nada grave.

"NO SE DEBE TOMAR LAS COSAS TAN EN SERIO", BROMEA POSADA

   De hecho, según ha reconocido después a los periodistas, se ha permitido hacerle una "broma" cuando ha comprobado que todo estaba "bien". "Le he dicho que no se debe tomar tan en serio estas cosas cuando interviene", ha revelado.

   Minutos más tarde era el portavoz adjunto de CiU, Pere Macías, el que confirmaba que lo ocurrido a Barberá se había quedado en un pequeño susto y el que informaba de que le iban a hacer un electrocardiograma "por precaución". "Parece que no es nada, pero estos días ha llevado ocho temas. Es lo que pasa a los grupos pequeños. Un poco de estrés", ha dicho Macías.