La veintena de universitarios que estaban encerrados en el Consejo Escolar del Estado desde la tarde del pasado viernes ha dado por finalizada su protesta, al aceptar la oferta del Ministerio de Educación de "estudiar y analizar" la política de becas.
Los estudiantes salieron al filo de la medianoche del edificio oficial situado en la madrileña calle de San Bernardo, donde leyeron a un grupo de compañeros que estaban allí para apoyarles el compromiso firmado por el secretario de Universidades, Jorge Sainz.
Por un lado, Sainz se compromete a celebrar tres reuniones anuales del pleno del Consejo Estatal de Estudiantes Universitarios (Ceune), y "al menos a uno" acudirá su presidente, el ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo.
De otro, "a instar la creación de una comisión mixta con CRUE y Ceune para estudiar y analizar el real decreto de umbrales de becas para el curso 2018/2019".
"Salimos muy contentos porque logramos un doble objetivo, demostrando que la comunidad universitaria estamos unida en las situaciones más difíciles", ha asegurado a Efe una de las estudiantes encerradas, Esther Bárcenas.
La principal causa de su protesta era la actual política de becas, que exige unos umbrales de renta y patrimonio y una nota de 6,5, pero también que Méndez de Vigo no asistiera al pleno del Ceune el pasado viernes por coincidir con la reunión del Consejo de Ministros.
"Es una lástima que por una tontería, como es cumplir la ley, tengamos que llegar a este punto", ha dicho la joven, que ha añadido que "la lucha no acaba" y ahora los estudiantes darán un plazo al Ministerio "a ver cómo responde".