El candidato del PSOE a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, propone renegociar la deuda de la región, que asciende a 33.270 millones de euros, según ha puesto de manifiesto en un desayuno informativo organizado por Europa Press.
Gabilondo ha subrayado que Madrid, con un presupuesto de 22.776 millones de euros, es "una Comunidad rica y endeudada", con una deuda que asciende a 5.079 euros por habitante.
Tras señalar que en los últimos cuatro años la deuda ha aumentado en 8.075 millones, ha apuntado que "lo peor de esta deuda" ---derivada de "los distintos presupuestos de estos años, apoyados por Cs", ha recordado--, "es que no ha servido para transformar nada, y que ahora condiciona las cuentas de los próximos años".
En este sentido, ha constatado que esto implica que nada más plantearse el presupuesto de 2020 "habrá que hacer un apartado de deuda pública para pagar 2.800 millones de euros de capital amortizado y unos 760 millones de intereses".
"Nos preocupa la sostenibilidad financiera de la Comunidad, teniendo en cuenta que la deuda pública supone un 150 por ciento del presupuesto de la región. Se precisa un plan estratégico para la reducción de la deuda de la Comunidad y la renegociación de la misma", ha aseverado.
Así, Gabilondo ha señalado como "uno de los mayores desafíos" para el Gobierno regional la elaboración de "un presupuesto sostenible, equilibrado y solidario", que pasa, a su juicio, por tener en cuenta los postulados de los grupos parlamentarios, sin olvidar que hay que "atender una amortización de 2.893 millones de euros, más sus intereses de unos 760 millones de euros".
"Se requieren equipos solventes, competentes, experimentados", ha afirmado Gabilondo, quien ha destacado la necesidad de "lograr prosperidad, bienestar, crecimiento y riqueza", y de hacerlo "de modo eficiente y sin exclusiones", porque "no hay estabilidad sin equilibrio" y "no hay prosperidad sin estabilidad".
En este punto, ha defendido que "la regeneración en la Comunidad de Madrid está ligada, sin ninguna duda, a la estabilidad", y ha criticado que la Legislatura "ha estado jalonada de denuncias, indagaciones judiciales y hechos probados que, una y otra vez, han puesto en cuestión, en cierto modo, el crédito y la capacidad de quienes han gobernado esta Comunidad, y con apoyos bien concretos".
"La moción de censura a la presidenta de la Comunidad, que desde nuestro Grupo Parlamentario presentamos, no se limitaba a cuestionar a una persona concreta sino a toda una época y a un modo de proceder que ha perdurado en los últimos cuatro años con el apoyo de Ciudadanos", ha precisado.
En esta línea, Gabilondo ha afirmado que "han sido veinticuatro años dedicados a concebir el gobierno de esta Comunidad de una manera que ha de ser cambiada", de manera que ha abogado por "un cambio en la forma de gobernar".
"Hemos vivido una experiencia en los modos de proceder más orientados a tener en cuenta los intereses particulares, cuando no propios, hasta ocasionar un daño patrimonial y siempre institucional", ha afirmado, para agregar que "ese modo de concebir las cosas es el germen de toda corrupción, y su fundamento".
Gabilondo ha señalado que Madrid es "una Comunidad extraordinaria en una situación insostenible", insostenible "social, económica, política y medioambientalmente", además de asegurar que es una región "inexplorada" y cuyo potencial "se está desaprovechando" por "inercia, resignación, cuando no dejadez".
"Necesitamos un cambio para reformar, transformar y progresar en la Comunidad de Madrid", ha aseverado Gabilondo, quien ha defendido que "solo por este camino" se logrará "la necesaria cohesión social y la calidad de vida para todos que exige la Constitución".
A preguntas de los asistentes tras su intervención, Gabilondo ha retomado el tema de la deuda y ha asegurado que no son "dogmáticos", pero que con el incremento que ha habido de 8.075 millones en cuatro años no se ha hecho ningún gran proyecto o inversión ni se ha resuelto el problema de la pobreza infantil, sino que no se ha hecho "nada".
A su juicio, responde al "puro gasto" generado por "un modelo que fiscalmente, financieramente no es muy sostenible para tener unos presupuestos justos".