La portavoz del Govern, Meritxell Budó, se ha disculpado este viernes por el tono utilizado al rechazar responder una pregunta en castellano cuando antes no se había formulado en catalán en una rueda de prensa: "Me sabe muy mal", ha señalado, aunque ha insistido en su tesis de que el turno de preguntas en castellano sirve para repetir las realizadas en catalán.
"Los 10 minutos finales son para repetir aquellas respuestas que se han dado en catalán", ha dicho este viernes en una entrevista en RNE y en declaraciones a la prensa, aunque ha insistido en que sus palabras no fueron del todo afortunadas y ha reconocido que no se utilizó el tono que requiere de una portavoz del gobierno, en sus palabras.
INVESTIDURA ADA COLAU
Preguntada sobre la sesión de investidura del Ayuntamiento de Barcelona este sábado, ha sostenido que si se realiza un pacto entre BComú, PSC y BCN Pel Canvi-Cs se confirmará "una operación de Estado para evitar que en la capital de Cataluña haya una alcaldía independentista".
"Si se acaba consolidando el pacto con las fuerzas del 155, se deduce que los comuns han decidido dejar la equidistancia", ha seguido Budó, que ha dicho que la disyuntiva está entre el camino del 155 y el de los que defienden las instituciones democráticas, en sus palabras.
INVESTIDURA DE SÁNCHEZ
Sobre la investidura de Pedro Sánchez, ha declarado que actualmente "no se dan las condiciones necesarias para facilitarla", porque a su parecer no existe un diálogo real por parte del Gobierno de Sánchez con el de Catalunya.
Ha defendido dialogar si es necesario con un mediador y relator, y ha asegurado que es indispensable y necesario que Sánchez manifieste una voluntad de diálogo, lo que a su parecer a "día de hoy" no es así.
"No se dan las condiciones necesarias para facilitar la investidura de Sánchez porque no hemos visto una voluntad clara de cambio en relación a Catalunya", ha insistido, y preguntada sobre que harán si ERC se abstiene o vota a favor, ha respondido que no se encuentran en tal escenario.
VUELTA DE LOS PRESOS
Además, ha dicho que lo que se tendría que producir una vez terminado el juicio a los políticos soberanistas es dejarlos en libertad y, en caso de que no sea posible, que sean devueltos "de forma inmediata" a las cárceles catalanas, según ella.
Ha anunciado que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, está liderando una rueda de contactos con entidades de la sociedad civil para "afrontar una respuesta conjunta ante la sentencia del juicio político que se ha llevado a cabo al Govern legítimo suspendido por convocar un referéndum".
Así, ha concluido que la respuesta "a una sentencia que no sea la absolución", debe ir más allá del Govern y caracterizarse por la unidad estratégica, según ella.