Saltó la noticia el viernes por la mañana cuando el entrenador del Decano, Sergi Barjuan, dio a conocer la lista de convocados y en ella no se encontraba Jonathan Valle. Posteriormente, el técnico comentó en sala de prensa que el cántabro no viajaba a Sabadell porque “no se siente implicado”.
Según ha podido saber Viva Huelva, Jonathan Valle recibió el pasado miércoles la visita de un compañero, se alargó hasta altas horas de la noche y se sintió incapaz de asistir a la sesión de entrenamiento del jueves a las 10:30 horas en la Ciudad Deportiva del Decano.
Posteriormente, dos jugadores de la primera plantilla del Recreativo y un empleado del club acudieron al domicilio de Valle y éste no les abrió la puerta. Es más, no atendió a ninguna de las llamadas que les hicieron sus compañeros.
Eso sí, el mismo jueves al mediodía había una comida de los jugadores y Jonathan Valle llegó algo más tarde que el resto de sus compañeros y no quiso quitarse las gafas de sol en el interior del local.
El jugador cántabro dio la espantada al Recre y a sus compañeros en el momento que más se le necesitaba y falló a la confianza de Sergi Barjuan, quien lo recuperó cuando se encontraba en el paro.
De todas formas, como también ha podido saber este diario, Valle no va a seguir la próxima temporada a pesar de que le queda una temporada más de contrato. El jugador busca con su representante una salida y su deseo está en regresar al Racing de Santander, pero también tiene ofertas del extranjero.
Actos de indisciplina como éste pueden cerrar las puertas al desarrollo profesional de un muy buen jugador castigado por su mala cabeza. El pasado año dio positivo en un control de alcoholemia en la capital onubense. Lejos, muy lejos, de los valores del deporte.
