Trabajadores de los centros concertados de protección de menores se concentraron ayer en silencio para mostrar su repulsa a los recortes de la delegación territorial de Políticas Sociales, que se han materializado este mes de marzo con el cierre de dos centros de la provincia (Marmolejo y Alcalá la Real); con menos plazas, pasando de 128 a 98, y con ocho trabajadores que han sido despedidos. a. guzmán