Susana Díaz: “Gracias por el regalo de estos 50 años”; Fernández de Moya anuncia la cesión de otra parcela
La inauguración de la nueva sede de la asociación de discapacitados Aprompsi se convirtió ayer en todo un acontecimiento social en la capital jienense. No solo reunió a toda la clase política y agentes sociales, algo por otra parte inusual en la provincia, sino que también puso de relieve la fortaleza de un colectivo que el pasado año celebró sus 50 años. Sus flamantes instalaciones, en la calle Eduardo Balguerías del Bulevar (que da nombre a un jiennense ilustre que fuera director del jardín botánico de Madrid el siglo pasado), han sido financiadas al 70% por la aportación de los socios de Aprompsi (el Estado subvencionó con 720.000 euros), que atiende hoy a 1.300 familias en sus 14 centros de la provincia y solo en Jaén da empleo a 200 personas. Pero, sin duda, el acto de ayer fue también un homenaje hacia el presidente de honor de Aprompsi, Vicente Oya, cuya labor en pro de las personas discapacitadas fue elogiada por todas las autoridades, e incluso el subdelegado del Gobierno, Juan Lillo, deslizó que había puesto dinero de su bolsillo para hacer realidad la sede. La presidenta de la Junta, Susana Díaz, dijo que es un centro “para la dignidad” de estas personas; el alcalde valoró la “humildad y generosidad” de Vicente Oya y anunció que el Ayuntamiento cederá otra parcela a Aprompsi; y Francisco Reyes trasladó el apoyo de Diputación a este centro. Vicente Oya reivindicó el apoyo a este colectivo “en estos tiempo tan convulsos”.