Isabel Paredes, delegada de Bienestar Social, Igualdad y Salud, acompañada de Paloma López Zurita, decana de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de la Universidad de Cádiz (UCA), y de Ana Alonso Lorente, presidenta del Consejo Social de la UCA, ha inaugurado las II Jornadas sobre la Mujer que bajo el lema que 'Mujeres en un contexto de crisis económica', que ha organizado el Ayuntamiento, la UCA y Diputación de Cádiz.
La delegada ha dedicado sus primeras palabras a agradecer la colaboración en favor del conocimiento, entre la universidad y los servicios sociales, “estamos una situación de crisis sin precedentes, debemos ir de la mano de la UCA. Existe un marco legislativo (ley de Igualdad 2007), marco que no garantiza la igualdad porque si no hay un reglamento que la desarrolle todo queda en una declaración de intenciones”, ha afirmado.
La delegada ha recordado, a modo de ejemplo la brecha salarial de la UE: 59 días de diferencia salarial. “La UE nos dice también que sólo un 13,7% de integrantes de los consejos de dirección son mujeres cuando el 60% son licenciadas, algo inversamente proporcional a la realidad imperante”. Paredes ha subrayado que el Gobierno va a adoptar medidas para reducir la brecha salarial en las empresas mediante la coordinación entre el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. La delegada ha anunciado que el Ayuntamiento no va escatimar esfuerzos para reforzar las políticas sociales.
Paloma López ha reconocido la labor de la Delegación de Bienestar Social, Igualdad y Salud en materia de género tras recordar los premios otorgados por la FEMP y FAMP, en concreto el premio progreso por el protocolo de violencia de género y por el programa educativo ‘Te quiero con respeto’. “Es una riqueza trabajar juntos UCA y Ayuntamiento desde ámbitos distintos porque nos enriquece y aprendemos el uno y el otro de lo que hacemos”, ha afirmado.
Ana Alonso, por su parte, ha calificado de “acertadísimo” el título de las jornadas porque “ocurre que cuando la crisis le da la espalda a la ciudadanía lo hace en particular a las mujeres. La crisis afecta de manera particular a las mujeres; se ensaña, son víctimas doblemente porque muchas mujeres se hacen cargo de la conciliación, son amas de casa, y cuidadoras de personas dependientes; son la población más vulnerable”, ha asegurado. De hecho, la crisis ha conllevado que las familias se reagrupen, “con la crisis no tienen vida propia, no tienen ocio, ni vida propia”, ha abundado Alonso.
Eva Saldaña primera ponente de las jornadas ha versado su intervención en los principios de igualdad recogidos tanto en la Constitución como en la Ley de Igualdad. Según estos principios, hombres y mujeres son iguales en valía, derechos y deberes. “Se recoge que no debe haber discriminación, es decir trato peyorativo, menoscabo de derechos pero en el plano salarial nos encontramos una práctica maquillada en forma de pluses”, ha afirmado. La doctora en Derecho ha mencionado también el principio transversalidad. “La legislación recoge el informe de impacto de género, su adopción, ejecución y definición”, principio que no siempre se lleva a cabo en el ámbito laboral.
Eva Saldaña ha insistido en los desequilibrios sociales basados en género en el campo de las relaciones laborales. “Solo 8% de los contratos laborales indefinidos son de mujeres mientras que en los hombres es del 20%”. Una desigualdad que también se da en los salarios con una media de diferencia salarial del 20%. Ha aportado datos que reflejan este desequilibrio en materia de empleo, así de las parejas con empleo y que cuentan con dos hijos el 58% son mujeres y el 82% hombres. Eva Saldaña ha abogado finalmente no sólo por una igualdad de género en derechos sino también la supresión de los roles ligados al ámbito femenino. “Ya existían diferencias en la época de vacas gordas, que se han visto aumentadas con la crisis”, ha apostillado.