Sin la Resurrección de Jesucristo nada de lo que se ha vivido a lo largo de la Semana tendría sentido. Comienza la Pascua y los cofrades vuelven a la normalidad del día a día, a las visitas vespertinas a las casas de hermandad, a los debates de lo que se hizo o no se debió de hacer, a las bolsas de caridad, al diseño de la feria que ya está ahí, a los cabildos de cierre de curso, a la preparación del nuevo curso cuando septiembre deje atrás las playas...y luego llegarán las zambombas y los Reyes y de nuevo a la realidad de una Cuaresma que anunciará que para finales de marzo llega otra Semana Santa.
Ya queda menos de un año. La nostalgia nos puede todavía pero ya se comienza a adivinar una Domingo de Resurrección en Jerez con túnicas y capirotes para el 2015, ya se otea en el horizonte, seguro, otro debate sobre esa Carrera Oficial que ojalá y se termine de ajustar definitivamente. ¿Será la que comienza en Aladro la definitiva? Parece que tiene todos los pronunciamientos para que así sea, aunque lo sucedido en la Noche de Jesús en plaza Esteve pone, cuanto menos, sobre el tapete los problemas de seguridad por aquello de qué hubiese ocurrido sin en lugar de producirse la estampida en una zona abierta como esa, el miedo se apodera de las personas que están en el sector de los palcos. ¿Qué hubiese pasado? Son cuestiones que están sobre la mesa de los debates, después de una Semana Santa para recordar.
El tiempo ha acompañado y de qué manera. Los cortejos han crecido en general en número de hermanos, se han visto imágenes precisas y preciosas y con unas vísperas, el Sábado de Pasión, que auguran que el futuro de nuestras hermandades y cofradías está asegurado. Esas vísperas son las que, de alguna manera, ponen en entredicho la realidad de la Carrera Oficial. ¿Qué pasará cuando haya cuarenta tres o cuarenta y cuatro hermandades, cuatro más que en Málaga, ciudad que casi nos triplica el número de habitantes, haciendo estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral? Ya tienen trabajo en la Unión de Hermandades. Y es que la Semana Santa se ha acabado, pero el trabajo en las casas de hermandades y en la propia Unión de Hermandades no ha hecho sino comenzar. Menos de un año queda, pero habrá procesiones extraordinarias y llegarán las de Gloria, apuntando ya en el mes de Mayo las de María Auxiliadora por Montealto, Mundo Nuevo, Cabezas o Icovesa...
