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“El futuro pasa por la internacionalización de nuestras empresas"

Unidad, consenso, utilidad, servicio... son algunos de los apelativos con los que la presidenta de la Diputación reivindica la labor desempeñada desde 2015

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  • “Hay que trasladar optimismo. Las circunstancias comienzan a cambiar”
  • “Queremos aprovechar nuestra historia, el Tricentenario, para crear oportunidades”

Irene García, próxima a cumplir dos años al frente de la Diputación de Cádiz, huye de las conmemoraciones gratuitas, y apuesta por convertir el Día de la Provincia en una oportunidad para subrayar las potencialidades del territorio y sus necesarias aspiraciones.

“El objetivo pasa por convertir este 19 de marzo en un gran escaparate para la provincia de Cádiz”

¿El 19 de marzo es un día para celebrar o para reivindicar?
—Yo creo que para ambas cosas. En primer lugar es un día para la esperanza, porque permite hacer balance de todo un año y con todo un ramillete de personas de la provincia, algunas por nacimiento, otras por destino, y que pueden ser ejemplo y grandes referencias de la potencialidad y la esperanza para poder seguir trabajando. Pero es obvio que es también un día para reclamar lo nuestro y reivindicar lo que aún nos queda por andar y por trabajar. También es un día para tender la mano, sumar esfuerzos de la mano del tejido empresarial y social, pero también de las instituciones para seguir demoliendo muchas barreras que aún siguen existiendo.

Usted, en el discurso del año pasado, reivindicó en liderazgo de la provincia en una provincia llena de contradicciones: mucho potencial, pero cifras lamentables, por ejemplo del paro. ¿Cree que la Diputación se ha hecho ya con la voz y las necesidades del pueblo?
—Creo que estamos en cada uno de los escenarios que permiten que Diputación alcance una voz propia. El objetivo primordial era convertir a Diputación en una entidad portadora de servicios, y creo que en ese sentido hemos dado pasos importantes para servir de sustento a los municipios de menos de 20.000 habitantes. Pero también hemos sido capaces de liderar una provincia llena de contradicciones, con elementos muy positivos, pero con una losa del desempleo estructural, que se convierte en un drama social para muchas familias y nos obliga a seguir trabajando para que ése no sea el titular que se asocie a la provincia, porque hay muchas potencialidades, grandes fortalezas, que hay que convertir ahora en oportunidades.

¿Por dónde va a girar el discurso de este año, si nos puede dar alguna pincelada?
—Me gustaría trasladar un mensaje de optimismo, porque vamos a alcanzar dos años al frente de la institución provincial y se han conseguido cosas que han permitido que distintas circunstancias comiencen a cambiar. En primer lugar, poner en valor el servicio que presta la Diputación, que durante mucho tiempo ha estado cuestionado. Es imprescindible para los municipios pequeños, ya que somos un gran sustento para el mantenimiento de multitud de servicios públicos básicos, pero también a la hora de reivindicar un espacio político que era necesario y que sirve además para aglutinar consensos y diálogos. En estos dos años hemos hablado mucho de sectores estratégicos, caso del de la pesca, del aeronáutico y naval, que hay que seguir reivindicando para que tenga fortaleza y se incorporen nuevos talentos, del de las propias empresas, para que adquieran más músculo; pero también lo hemos hecho desde el punto de los servicios sociales, donde se siguen blindando y apoyando la prestación de diversos servicios públicos para aquellas familias que necesitan un ritmo asistencial, y hemos hablado de un sector turístico que está aportando muchas oportunidades. En este sentido, no sólo me gustaría esbozar lo hecho, sino que en virtud de los premiados  hay que lanzar un mensaje de esperanza y que nos dirija al optimismo.

Uno de los instrumentos empleados para mejorar la situación de la provincia son los fondos de la ITI, ¿está satisfecha por cómo se están aplicando hasta la fecha?
—Ya estamos viendo un principio de resultado. Lo que me gustaría es que todos tuviéramos la misma altura de miras con que se ha planteado por parte de la Junta y que lo convirtamos en una gran oportunidad de presente y de futuro a la hora de apostar por sectores estratégicos de la provincia. En ese sentido debe primar el consenso. Nosotros hemos apoyado el desarrollo de varios proyectos, sino que hemos creado una oficina de atención al público y ahora parece que el Gobierno central quiere duplicar esos recursos y esos servicios, cuando es algo que nadie entiende y que además está generando confusión entre las empresas interesadas en desarrollar nuevos proyectos. Hay que tener altura de miras y apostar por un modelo único para atajar el desempleo de la mano del sector empresarial, y que se saquen propuestas concretas para que muchas de ellas se desarrollen. Estoy convencida de que éste va a ser el año del despegue para todas esas iniciativas que ya han empezado a desarrollarse .

Ha dicho que el discurso de este 19 de marzo estará construido en base a los galardonados. Si nos atenemos a los nombres de buena parte de ellos, ¿son el comercio, la pesca, la industria... los asideros en los que se debe consolidar la economía, más allá del ámbito turístico?
—Son algunos más. Afortunadamente ofrecemos sectores muy variopintos que pueden convertirse en una oportunidad para la creación de empleo. Es cierto que hemos querido reconocer el esfuerzo y el trabajo realizado por personas y entidades de la provincia, pero también queremos que sirva de soporte y apoyo para que lo sigan haciendo en el futuro. Así, tenemos el ejemplo de la Cámara de Comercio de Jerez, a la que no sólo se le reconoce su trayectoria hasta la fecha, sino su apuesta por la internacionalización de nuestras empresas; no hay que olvidar que somos la provincia más exportadora de Andalucía, pero el 82% de las empresas gaditanas son empresas muy pequeñas que necesitan del apoyo de las administraciones para salir, vender fuera e internacionalizar sus productos para ampliar el espectro de la generación de empleo.

El que la provincia y Andalucía venda más de lo que compre, ¿es ejemplo del modelo productivo por el que se debe aspirar?
—Estoy convencida además de que hay que aprovechar esa iniciativa de las cámaras de comercio por internacionalizar las empresas como una auténtica percha de cara al futuro para que la provincia sea conocida en el exterior. Es el camino. Hemos apoyado algunas de sus acciones comerciales en distintos países del mundo para acompañar de primera mano a las empresas, ya que tras unos años de dificultades las empresas de la provincia que sí han salido al exterior han sido las que han tenido mayor oportunidad de crecimiento, mayor capacidad para crear empleo, y ése es un camino en el que hay que ahondar.

De cara a la designación del título de hija predilecta de la provincia han tomado una decisión poco ortodoxa, pero valiente y llena de justicia: Gisela Pulido. Es la mujer más laureada del deporte nacional en este momento y ejerce de embajadora de Tarifa y la provincia por todo el mundo. Además, ha dicho en una reciente entrevista que los jóvenes de la provincia tienen que dejar huella en su tierra. Qué mensaje más bonito, ¿no?
—Totalmente. Creo que Gisela es una magnífico ejemplo para conmemorar el día de la provincia, ya que los premiados tienen que ser por sí mismos un aliciente para las demás personas de la provincia. Ha sido una apuesta valiente, pero su trayectoria, pese a su juventud, es toda una demostración de la cultura del esfuerzo, del talento, de valía, que tiene que ser reconocida por la propia realidad gaditana. Teníamos mucho interés también en que se reconociera a una mujer, por lo que supone de referencia para otras muchas mujeres que son heroinas invisibles. El día de la provincia tiene  que ser un escaparate de referencias personales y creo que ella lo es. Espero que sirva para que muchas jóvenes la puedan tomar como referencia y se identifiquen con su trayectoria para que le contagien su vitalidad.

2017 es el año del tercer centenario de la casa de contratación de Sevilla a Cádiz. ¿Qué debe significar esta efeméride para la provincia? ¿Cómo evitar, como ha ocurrido en otras ocasiones, que no se quede en un ejercicio de melancolía?
—De eso hemos huído. Porque ha habido conmemoraciones que después han quedado en nada, y el sentido que le hemos querido dar a esta conmemoración es poder soñar de la mano de nuestra historia asentándola en oportunidades que puedan quedar para siempre, y eso ha sido posible además gracias a una amplia unidad institucional. Se ha generado el espacio para que todos se sientan cómodos y a eso se ha sumado una llamada colectiva de la participación ciudadana. Detrás ha habido un trabajo serio y riguroso de propuestas concretas, de manera que no sólo se profundice en la historia y el conocimiento, sino que también se aproveche como hito de dinamismo cultural para la ciudad. Hay detrás toda una oportunidad para construir un relato en torno a la Bahía gaditana en ese nexo común que permitió la gran capitalidad comercial con América. De hecho, muchas de las misiones comerciales que se van a emprender son en países latinoamericanos que nos permitan volver al esplendor de entonces. Hay una enorme batería de actuaciones empresariales y culturales. Hemos huído de triunfalismos y de boatos innecesarios en favor de una apuesta con mayor continuidad en el tiempo.

¿Qué le parecen los argumentos que se emplean para justificar la supresión de las diputaciones?
—Soy una firme defensora de las diputaciones provinciales, porque conozco el papel que desmpeñan. Si no existieran, sería necesario otro ente supramunicipal para apoyar a los municipios más pequeños. Lo que sí tenemos que determinar es el papel que tenemos cada una de las administraciones y cumplirlo. Nosotros, desde la provincia de Cádiz, le estamos dando un sentido de utilidad que la gente tiene que conocer.

El año pasado pusieron en marcha la campaña “Soy de Cádiz”, en una provincia en la que a muchos ciudadanos les cuesta decirse gaditanos, ¿cómo se afronta ese tipo de peculiaridades?  
—Es algo que tenemos muy presente en momentos como el que celebramos ahora, porque el día de la provincia no es sólo un acto de homenaje, es reconocer trayectorias, pero el objetivo primordial es convertir a la provincia en un gran escaparate. Es cierto que tenemos grandes problemas y dificultades, pero también tenemos elementos que con el apoyo de todos podemos plasmarlos en una provincia de gran fortaleza. Además, nuestra ubicación geográfica es nuestra oportunidad, lo que hay que ser capaces de vislumbrar ese camino, y ahí hemos puesto todo de nuestra parte. Hemos querido asimismo cambiar nuestro modo de relacionarnos con las instituciones, es el momento del acompañamiento, que Diputación sea un elemento que contribuya a generar esas fortalezas. Me gustaría poder seguir crecimiento. Algo habremos hecho ya todos, y en algo habremos contribuido, por ejemplo, para que los datos de empleo sean mejores que los del año pasado. Es verdad que una de las brechas que ha tenido la provincia durante mucho tiempo ha sido el de los liderazgos localistas muy potentes, que además han cegado la posibilidad de proyectos comunes. Creo que estamos siendo capaces de superar esos localismos con iniciativas como el consejo de alcaldes.

*Transcripción de la entrevista realizada en el espacio Acento Andaluz de Ondaluz TV

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