La huelga de limpieza en Málaga encara su cuarta jornada a las puertas del fin de semana y sin acuerdo. Pese a que empresa y Ayuntamiento han retomado el diálogo, la reunión celebrada este viernes no ha logrado acercar posturas sobre la recuperación de la paga de productividad, principal escollo en la negociación. La plantilla exige cobrar este año, mientras el Ayuntamiento se escuda en que las cuentas de 2016 ya están cerradas y vuelve a poner sobre la mesa comenzar a recuperarla a partir de 2017, una parte, y de forma íntegra, en 2018.
Ahora, además, la empresa pone sobre la mesa una nueva alternativa: esperar a que los tribunales decidan sobre la demanda por el conflicto colectivo interpuesto que deberá dictaminar si para aplicar el convenio laboral vigente, de 2010-2012, se deben tener en cuenta las modificaciones posteriores. El Ayuntamiento apuntó hoy como novedad que la Junta de Andalucía les da ahora luz verde a inscribir los acuerdos que permitieron desconvocar la huelga en la Navidad de 2013 como acuerdo parcial. Mientras la basura continúa acumulándose en las calles, el alcalde, Francisco de la Torre, da las gracias a los vecinos por su colaboración "y paciencia".
A la salida, el presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte, se ha mostrado firme en la postura de la plantilla que, ha asegurado, está "unida" y no claudicará. Además, ha reprochado al alcalde que les eche “encima a los malagueños” a cuenta de sus sueldos insistiendo en que reivindican lo que sacrificaron durante los años de crisis. Este sábado, a las cinco de la tarde en el Ayuntamiento volverán a verse las caras de nuevo.