La empresa japonesa Fujitsu ha presentado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para 380 trabajadores de los cerca de 500 con los que cuenta su fábrica en Málaga, que podrá afectar a todos ellos o sólo a parte, debido a la quiebra de la naviera coreana Hanjin que les provee de materiales.
Así lo ha comunicado este viernes el presidente del comité de empresa y también secretario general del Sindicato de Industria de CCOO de Málaga, José Lozano, que ha remarcado que este expediente se ha planteado con "carácter general" para "la máxima plantilla de la producción", ya que la situación de la naviera coreana "puede afectar a unas líneas de producción y a otras no, dependiendo de los materiales que se queden en el camino".
Lozano ha explicado que la empresa "se compromete a abonar el cien por cien del salario de los trabajadores por los días no trabajados", que serán sólo de la ciudad malagueña ya que la situación de la naviera no afecta a otras, según ha señalado. "En el sindicato no nos consta que haya tenido incidencia en otras empresas", ha apuntado.
La fábrica de Fujitsu en Málaga es la única factoría de Europa de la empresa y produce dispositivos electrónicos para automóviles, en concreto, de seguridad y radio, y Toyota es su principal cliente, ha señalado. También fabrican cajeros automáticos principalmente para cajas de ahorros.
Por otro lado, Lozano también ha insistido en que "se están haciendo todos los esfuerzos necesarios para que la incidencia de este ERTE sea la menor". "Si hay alguna incidencia va a ser mínima, y la dirección va a hacer todos los esfuerzos necesarios para que no tenga que actuar el ERTE y, en el peor de los casos, sea lo menos posible", ha opinado.
Esta situación ha sido provocada por la quiebra de la naviera coreana Hanjin, que suministra los componentes electrónicos de todo el sureste asiático Fujitsu, lo que "ha puesto en riesgo las líneas de producción".
Lozano ha explicado que debido al temor a esta quiebra, los puertos prohíben la entrada a algunos de los barcos de la naviera, ya que no podrían pagar el atraque, y además también los mismos propietarios de la mercancía que transportan temen que si los barcos entran a puerto, un juez pueda precintarlos y se quede inmovilizado el material.
El trayecto de estos barcos por todo el sureste asiático tarda entre 30-40 días, ha informado, "por eso el ERTE se ha planteado hasta el día 7 de noviembre, porque en principio para esas fechas debería normalizarse la situación", y deberían haber llegado esos barcos que ahora se encuentran en el Algeciras (Cádiz), el Canal de Suez o Singapur.
La empresa pidió a todos los proveedores que incrementasen la producción y se la intentasen enviar por avión, "con lo cual, la empresa asume el sobrecoste del transporte del material".
La fábrica de Fujitsu en Málaga es la única factoría de Europa de la empresa y produce dispositivos electrónicos para automóviles, en concreto, de seguridad y radio, y Toyota es su principal cliente, ha señalado. "Por eso la empresa está dispuesta a asumir sobrecostes, porque lo que no se quiere es interrumpir la cadena de producción de Toyota", ha señalado, indicando que, los últimos años están siendo "de los mejores en cuanto a pedidos". También fabrican cajeros automáticos principalmente para cajas de ahorros.
Lozano, además, ha apuntado que esta mañana el consejo de Korean Air Lines, el mayor accionista de la colapsada Hanjin Shipping, ha liberado un préstamo para intentar que, así, entren en puerto todos los barcos.
Así, la aerolínea ha aprobado un préstamo de 60.000 millones de wones surcoreanos --48,3 millones de euros-- a la empresa transportista de contenedores, utilizando los recibos de Hanjin aún por cobrar como garantía, según confirmó un portavoz de la aerolínea el miércoles, que dijo que los fondos se utilizarían para ayudar a descargar los contenedores de los buques de Hanjin.
El mes pasado, la compañía surcoreana se declaró bajo tutela judicial con una deuda de aproximadamente seis billones de wones surcoreanos --48.299 millones de euros--.