El consejo de administración del Unicaja se despidió este lunes del técnico Joan Plaza, quien fue entrenador del equipo malagueño las cinco últimas temporadas, y le hizo entrega de la insignia de oro del club en reconocimiento a su dedicación y profesionalidad.

El presidente del Unicaja, Eduardo García, durante la comida con la que se agasajó al preparador barcelonés, fue el encargado de entregar la distinción a Plaza, que deja como legado deportivo el título de la Eurocopa logrado en la campaña 2016-17.

García afirmó, en declaraciones facilitadas por el club malagueño, que "el consejo ha decidido concederle a Joan Plaza la máxima distinción por los cinco años que ha hecho disfrutar de su baloncesto, de su trabajo, de su constancia y su esfuerzo", y puntualizó que "es de bien nacidos ser agradecidos" y que no podían "menos que celebrarlo y concederle esta distinción".

Joan Plaza dijo que esa distinción le hace sentirse "honrado y contento" y que "compensa un poco estos cinco años de buenos momentos, también alguno malo, pero sobre todo muchos buenos momentos".

"No sé el mérito que he hecho, pero sé que me soy mejor entrenador, mejor persona y trabajaré por si hay una oportunidad de volver", dijo el técnico catalán.

"Quiero mandar un beso muy fuerte a todos los aficionados, los ayudantes, los jugadores que me han sufrido, al 'staff' técnico y desear lo mejor al Unicaja", apostilló.

El club malagueño ya presentó la pasada semana a Luis Casimiro como nuevo entrenador del equipo, con el que se ha comprometido por dos campañas.