La Audiencia de Málaga ha condenado a tres hombres por
entrar en viviendas de varias ciudades de España para robar. Así, se les impone a cada uno la
pena de tres años y medio de prisión, aunque uno de ellos es condenado, además, por
atentado a la autoridad y los otros dos por resistencia.
Los hechos sucedieron entre abril y junio de 2016. Según se señala en la sentencia, los acusados se pusieron de acuerdo, y utilizando los métodos de 'bumping' o 'impresioning', por el que hacen saltar las cerraduras de las puertas, entraron en un domicilio en la localidad malagueña de Vélez-Málaga de donde
se llevaron 2.500 euros en efectivo y joyas.
Pocos días después, fueron a otra casa, esta vez de la capital malagueña, donde entraron utilizando los mismos sistemas, y lograron sustraer numerosas joyas, señala la resolución, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que se indica que se
desplazaban desde Murcia a los distintos lugares.
Así, en junio del mismo año,
fueron a Villagarcía de Arousa (Pontevedra), donde perpetraron robos en dos viviendas de un mismo edificio, llevándose joyas, oro y plata, dice la sentencia. Asimismo, fueron a
Ferrol, donde entraron en otro domicilio y sustrajeron diversos objetos de valor.
Los acusados
fueron interceptados por agentes de la Policía Nacional
cuando regresaban a Murcia, momento en el que intentaron huir de los efectivos policiales, causando lesiones. Los objetos sustraídos y no recuperados han sido tasados en
unos 31.000 euros.
Por estos hechos, se les condena a los tres por un delito de robo, por el que se le impone tres años y medio a cada uno. Pero, a uno de ellos se le condena también por un delito de atentado a la pena de un año de cárcel y a los otros dos se les imponen seis meses de prisión más por un delito de resistencia.
Además, los procesados, nacidos en Rumanía,
tendrán que indemnizar a los propietarios por los efectos no recuperados y a los
policías nacionales que resultaron lesionados. Esta sentencia se dictó con la conformidad de los acusados con los hechos que les achacaba la Fiscalía.