El concejal del PP Félix Romero ha informado de que su grupo exigirá a la Junta de Andalucia que incluya los cuarenta millones que el Ayuntamiento le ha devuelto ya del anticipo reintegrable en inversiones que están pendientes en Marbella.

Romero ha explicado que ésta será una de las mociones que su grupo presentará al pleno ordinario de este mes, “al que solo podemos presentar dos iniciativas”, ha recordado,  lo que es una muestra más del talante antidemocrático de los que se autoproclamaban adalides de la participación.

Ha relatado que el Ayuntamiento ha devuelto en los últimos años hasta cuarenta millones de euros a las arcas autonómicas, “con enorme esfuerzo y en detrimento de la inversión municipal,  sin que hasta la fecha haya revertido en la ciudad nada de las cantidades abonadas".

El edil se ha referido al déficit de equipamientos públicos que "soporta desde hace muchos años la ciudad, con un atraso muy clamoroso en infresctructuras básicas como centros de salud, colegios, institutos, residencias de mayores o instalaciones judiciales".

A este respecto, el portavoz del equpo de Gobierno, Javier Porcuna, ha instado al edil del PP a que “aproveche la ocasión para reclamar al Gobierno central los 600 millones de euros que prometió la ministra Fátima Báñez para la ciudad”.

“Marbella cuenta ahora con un gobierno serio, responsable, que trabaja por el interés de sus ciudadanos demandando al resto de administraciones lo que nos corresponde”, ha señalado el edil, quien ha lamentado que “desde el PP se haga todo lo contrario”.

“Ha sido el PP el que ha impulsado la estrategia para que el dinero que corresponde a la ciudad por las multas de los procedimientos relativos a casos de corrupción no beneficie a la actual generación que es la que ha sufrido el saqueo y ahora se está desmarcando de la unidad que necesita la ciudad para superar la situación urbanística tras la anulación del PGOU de 2010”, ha indicado.

Además, ha reprochado al partido de la oposición que “apueste por soluciones sin sentido y con medidas que nunca plantearía si estuviera en el gobierno, con un marcado carácter electoralista de cara a los comicios generales de diciembre”.