Los saqueadores de yacimientos buscaban las monedas mediante el uso de detectores de metales.
El grupo de saqueadores de yacimientos arqueológicos en Valencia y Castilla-La Mancha desarticulado por la Guardia Civil en la operación Necrópolis empleaba detectores de metales para localizar los restos, principalmente monedas, de las que se han intervenido unas 9.000 de un valor “incalculable”.
Así lo aseguró ayer en declaraciones a los periodistas el portavoz de la Unidad Central Operativa (UCO) del instituto armado, Félix Ruiz, que también señaló que los doce “piteros” detenidos -nombre con el que se designa a las personas que expolian yacimientos mediante el uso de detectores de metales, que “pitan” al localizar alguna pieza- son de nacionalidad española.
A falta de una tasación definitiva de los expertos, Ruiz dijo que entre las más de 9.000 piezas intervenidas en el marco de la operación, destaca el hallazgo de un conjunto de monedas que los miembros del grupo ya habían limpiado y que habían sido seleccionadas para su colección particular.
Durante la operación se efectuaron registros en trece domicilios de los detenidos en las localidades valencianas de Aldaya, Alaquas, Manises y Moncada, donde se intervinieron objetos arqueológicos de gran importancia histórica y científica, como monedas, medallas, detectores de metales y planos cartográficos de yacimientos, así como material para la limpieza de las piezas.