El Instituto para las Obras de Religión (IOR), más conocido como Banco Vaticano, ha lanzado un sitio web en el que informa sobre la reforma del instituto y sobre su tarea de conseguir un banco que responda a todas las normas internacionales, un banco "limpio" y "de servicio" para permitir al Papa decidir de cara al futuro "la forma correcta" del instituto, según ha afirmado el presidente del IOR, Ernst Von Freyberg.
"El pasado mes de mayo dijimos que en los próximos meses estaríamos concentrados sobre todo en concluir con éxito el proceso Moneyval, en el cumplimiento de todas las normas sobre el lavado de dinero y en crear transparencia", ha subrayado Von Freyberg en Radio Vaticana.
Además, Von Freyberg ha anunciado que el próximo paso que darán en el IOR será publicar por primera vez el balance anual de cierre. "Desde hace muchos años, el IOR tiene un balance anual de cierre certificado: este año, por primera vez, lo publicaremos", ha asegurado.
Por ello, según ha apuntado, esta página web tiene como objetivo informar a sus colaboradores, clientes, a la Iglesia y a la opinión pública sobre el IOR, sus objetivos, su reforma, lo que hace en el mundo y sobre cómo apoya a la Iglesia en su misión y en sus obras caritativas.
El la web, el IOR apunta que solo ofrece sus servicios a personas físicas o jurídicas con una afiliación a la Iglesia Católica y revela que a finales de 2012 sus clientes eran: 5.200 instituciones católicas --Santa Sede, órdenes religiosas y diócesis-- que dan cuenta de más del 85 por ciento de los activos bajo gestión; y 13.700 individuos --clérigos, empleados del Vaticano y diplomáticos acreditados ante la Santa Sede--.
Además, añade que el IOR tiene cuentas con salarios y pensiones de 5.000 personas empleadas por el Vaticano y precisa que, de acuerdo con los requisitos de la Ley Vaticana y de los sistemas de pago interbancarios internacionales, las cuentas del Banco Vaticano se abren a nombre del cliente sin opción a que existan cuentas anónimas.
Además, en el marco del proceso de reforma y mejora de sus estructuras internas, el IOR afirma en su web que están llevando a cabo una extensa evaluación de todas las cuentas de sus clientes con el objetivo de cerrar aquellas relaciones que no se ajustan a los estándares del Instituto, una tarea que está siendo supervisada por la Autoridad de Información Financiera (AIF).