El público que se congregó en el teatro municipal para ver esta obra teatral de difícil título, pudo asistir a una interesante aportación al teatro español actual. Con una puesta en escena arriesgada, un texto de primera calidad, unos extraordinarios actores y una duración adecuada. En definitiva, una de las mejores producciones de la temporada. Una hora de divertida e inteligente exploración de lo que tienen en la cabeza y entre las piernas los jóvenes adultos de nuestros días, esos que rondan los cuarenta y se sienten identificados con el último anuncio de coca-cola.
El autor de la misma, ahonda en los entresijos de su criatura "Nace de la necesidad de reflexionar sobre una paradoja: la sociedad nos exige una identidad, nosotros exigimos a los demás una identidad, y nos la exigimos a nosotros mismos, pero la experiencia nos demuestra que no existe la identidad, que la personalidad es algo mutable y en constante movimiento, algo que no puede fijarse en el tiempo y en el espacio…" , concluye Alfredo Sanzol acerca de Si, pero no lo soy, Una obra, la del pasado sábado, en la que cinco actores (Paco Déniz, Natalia Hernadez, Juan Antonio Lumbreras, Lucía Quintana y Pablo Vazquez) tenían la difícil tarea de representar nada menos que a 38 personajes diferentes. Una prueba que superaron con creces a tenor de la respuesta del público. Los actores protagonizaron quince historias sin ningún nexo de unión entre ellas. desde una actriz de 70 años que recibe el premio a la mejor actriz revelación a un confidente de la policía que se reúne con sus amigos, pasando por una mujer que intenta parecerse a la amante de su marido, una madre que trata de no parecerse a su hija o una pareja de navarros perdidos en el Pacífico el 7 de julio, entre otras.
Sí, pero no lo soy es la última sentencia de la anterior obra de Sanzol, Risas y Destrucción, a partir de la cual comenzó a construir la historia basándose en los resultados que salieron al introducir esta frase en el buscador de internet Google. "Estaba muy interesado en trabajar con el azar y en Google encontré una manera de que aparecieran historias que yo no elegía", explica el autor.
Alfredo Sanzol debutó como director con la obra Como los griegos y a lo largo de su carrera ha dirigido entre otras Carrusel Palace, Cous cous y churros, Móviles y Como levantar piedras sin hundirte en las aceras. También trabajó recientemente como ayudante de dirección de Alejandro Vera en Divinas palabras.