Se cumplen en estas fechas 5 años desde que Lucía Fandiño Gálvez participase en su primera competición de halterofilia, en una jornada de Liga que tuvo lugar en San Fernando. Comenzaba así un camino que, tras años de dedicación a su deporte, le ha supuesto enormes satisfacciones. La última, la consecución del Campeonato de España Junior. A sus 19 años, comienza ahora a preparar las competiciones internacionales que tendrán lugar en otoño de este año. La joven deportista del Club Halterofilia Sanlúcar analiza todo lo que ha conseguido y lo que falta por llegar.
En primer lugar queremos felicitarte por haberte proclamado recientemente Campeona de España Junior. Imagino que estarás contenta con la temporada que estás realizando.
Muchas gracias. La verdad que no puedo estar más contenta con los resultados de esta temporada. Desde el principio teníamos un objetivo en mente, el Campeonato del Mundo Junior, pero ir consiguiendo logros así durante el camino me motiva mucho para seguir dando el máximo en los entrenamientos.
Pregunta inevitable. ¿Cuando y por qué empiezas a practicar un deporte de nulo arraigo en tu localidad como la halterofilia?
Empecé a hacer crossfit en el Central Box Sanlúcar en 2018, gracias a Aurora, una profesora que estaba de prácticas en mi colegio y que nos animó a mí y a mis amigos a probar. Al año siguiente comencé a practicar halterofilia de la mano de Manu y de los entrenadores del Club Halterofilia San Fernando, Adolfo y Lorenzo, los cuales confiaron en mí desde el principio, me enseñaron la técnica de los movimientos con una pica de madera y 5 años después aquí estoy gracias a ellos.
Desde hace dos años resides en Madrid, formando parte de la Selección Nacional en la Residencia Joaquín Blume. ¿Cómo es el día a día de una atleta de Alto Rendimiento?
La verdad es que los días en la residencia son intensos. Entrenamos los lunes, martes, miércoles y viernes por la mañana y por la tarde, y los jueves y sábado sólo por la mañana. El tiempo libre que me queda lo dedico a estudiar y a descansar. El estar lejos de casa es duro, pero también te da la oportunidad de conocer gente maravillosa, como para mí son Josep, Nerea y Eki, que al final se convierten en tu familia en la Residencia. Es una vida completamente dedicada al deporte, sin embargo, yo no la cambiaría por nada.
A lo largo de estos años has participado en decenas de competiciones a nivel nacional, e incluso internacional. ¿De cuál guardas un recuerdo más especial?
De todas las competiciones me llevo siempre algo positivo, por lo que se me hace complicado elegir. Diría que el Europeo Junior en Rumanía, mi primera competición internacional. A pesar de que no fue mi mejor competición, me hizo mucha ilusión subirme a la tarima junto a las mejores levantadoras juniors del continente. Es especial para mí porque a pesar de estar tan lejos pude sentir a toda la gente que me apoyaba desde España y que estuvo pegada a la tele desde tan temprano para verme: mis padres, mi entrenador, mis tíos, mis primas y demás personas del Box.
La halterofilia femenina está experimentando un crecimiento muy significativo, tanto en resultados como en participación, ¿ a qué crees que es debido?
Me alegra mucho que cada vez haya mayor participación femenina. Pienso que estamos dejando atrás el mito de que la halterofilia es un deporte de hombres y se está viendo que cualquiera puede hacerlo, sin importar su sexo, edad o condición física. Creo que al haber más chicas en España levantando pesos altos puede inspirar a aquellas jóvenes que se creen incapaces, motivándolas así a probar.
El proceso que has recorrido, desde deportista de base hasta llegar al alto rendimiento, habrá tenido sus momentos difíciles. ¿Cómo se sale de ellos?
Con mucha paciencia y rodeándote de gente que confía en tí. Las lesiones son casi inevitables en la vida de un deportista y a su vez es lo más duro de llevar, sobre todo a nivel mental. Si no hubiera sido por mi entrenador y mis padres que me apoyaron durante el proceso de recuperación de una lesión que tuve, probablemente lo habría dejado. Como se dice, esto es una carrera de fondo, al final gana el que no se rinde.
Tu club, el Halterofilia Sanlúcar, aunque de reciente creación, acumula bastantes éxitos a nivel deportivo...
Pues sí, a pesar de llevar tan poquito tiempo hemos conseguido una notable reputación dentro de la halterofilia española. Muestra de ello es la tercera posición que obtuvimos el equipo femenino en la Copa de Clubes Sub 18 celebrada en Alzira el pasado año. Así como varias medallas individuales en competiciones nacionales sub 15, sub 17 y junior.
La temporada aún no ha acabado, llegan nada menos que las competiciones internacionales. ¿Cómo afrontas esta segunda parte de la temporada?
La verdad que muy motivada. A finales de septiembre se realizará el campeonato del mundo junior en León, por lo que me hace mucha ilusión poder competir en mi país y estar tan cerca de los míos. Al mes siguiente tendrá lugar el Campeonato de Europa Junior en Polonia, última fecha importante de la temporada. Son dos competiciones que estamos preparando con muchas ganas para llegar en las mejores condiciones posibles.
¿Qué le dirías a alguien que esté leyendo esta entrevista y que quiera empezar a practicar halterofilia?
Si le llama la atención que se anime a probar. Cuando empecé era una niña que ni siquiera sabía lo que era una barra y practicar este deporte ahora me ha cambiado la vida. La halterofilia es un deporte precioso que te enseña valores como son la disciplina, la paciencia o el esfuerzo por conseguir tus objetivos. Y a pesar de ser un deporte individual yo lo considero de equipo, ya que no sería lo mismo sin los ánimos de los compañeros de entreno, de los entrenadores y de la familia y amigos.
Mucha suerte en lo que queda de temporada, Lucía, estaremos atentos.
Muchas gracias, espero poder traer buenas noticias en los próximos meses.