El conjunto arqueológico de Itálica, ubicado en Santiponce y candidato a la declaración de Patrimonio Mundial, ha alcanzado en 2024 un total de 222.880 visitantes, consolidándose como uno de los espacios culturales más visitados de Andalucía. Esta cifra representa un notable incremento respecto a los 155.496 visitantes de 2023 y los 168.224 de 2019, el último año completo antes de la pandemia. Sin embargo, persisten quejas sobre la falta de personal en el recinto, lo que en algunas ocasiones ha llevado a permitir el acceso libre sin control de aforo, impidiendo contabilizar con exactitud el número real de visitas.
Uno de los episodios recientes más polémicos en la historia de Itálica ha sido la fallida investigación sobre la posible existencia de un circo romano en el yacimiento. Un estudio basado en georradar y tomografía de resistividad eléctrica sugería la presencia de restos arquitectónicos, pero las excavaciones posteriores desmintieron esta teoría al no encontrar evidencias estructurales que confirmaran su existencia. Este revés ha generado debate sobre la interpretación del sitio arqueológico y la necesidad de continuar investigando con rigor.
Por otro lado, los dólmenes de La Pastora y Matarrubilla, situados en Valencina de la Concepción y pertenecientes a la Edad del Cobre, han vuelto a figurar en la estadística oficial de la Red de Espacios Culturales de Andalucía. Tras permanecer cerrados desde el inicio de la pandemia, en 2022 se permitió nuevamente el acceso a La Pastora, pero no fue hasta junio de 2024 cuando comenzaron a contabilizarse las visitas de manera oficial, alcanzando un total de 5.398 entre junio y diciembre. A pesar de esta recuperación, el 'tholos' de Matarrubilla sigue inaccesible debido a restricciones impuestas por el propietario de los terrenos donde se encuentra.
La reaparición de los dólmenes de Valencina en los registros pone de manifiesto el interés creciente por el patrimonio prehistórico de la zona, a la par que Itálica sigue consolidándose como un referente del legado romano en España. Ambos enclaves reflejan la riqueza histórica del área metropolitana de Sevilla, con un notable incremento en la afluencia de visitantes que subraya la importancia de seguir invirtiendo en su conservación y promoción.