El príncipe de Asturias ha asistido este jueves en la base aérea de Tablada, junto a la ciudad de Sevilla, a un ejercicio de despliegue del Grupo Móvil de Control Aéreo (GRUMOCA), que habitualmente interviene en operaciones internacionales y en otras nacionales de control del espacio aéreo.

Don Felipe llegó a las once en punto de la mañana en un helicóptero procedente de Getafe y, en traje de campaña del Ejército del Aire, fue recibido en la pista de aterrizaje por el general del Aire Francisco Javier García Arnáiz, jefe del Estado Mayor del Aire, entre otros mandos militares.

Tras una reunión celebrada en una tienda de campaña, el príncipe visitó los distintos módulos desplegados en el operativo junto a la pista de aterrizaje de la Dehesa de Tablada, como el de Apoyo Logístico y el de Mando y Control, además de una torre de control transportable, desde la cual siguió otras explicaciones sobre el operativo y capacidad del GRUMOCA.

Con base en Tablada, este grupo fue creado en 1966 para asumir las funciones que hasta entonces tenía el Primer Grupo de Transmisiones de Getafe, desde 1974 posee radar táctico que le permite participar en la vigilancia y control del espacio aéreo y desde 1995 recibe el nombre de GRUMOCA y tiene la misión de despliegue y operación de mando, control y comunicaciones para apoyar operaciones aéreas.

El GRUMOCA es capaz de constituir una base aérea expedicionaria, es decir, instalar en pocas horas todo el operativo de un aeropuerto donde sólo hay una pista de aterrizaje, para lo cual, como unidad de actuación rápida, es aerotransportable y dispone de instalaciones propias como vehículos blindados, hospital, ambulancia y cocina, entre otras, ya que debe ser autosuficiente.

Todos los medios del Grupo son trasladables en 26 vuelos y en un plazo de día y medio, y entre sus misiones está también sustituir y complementar medios de la defensa aérea, sobre todo radares que permiten detectar aviones en doscientos kilómetros a la redonda.

El Grupo está integrado por 173 efectivos, de los que el 10 por ciento son mujeres, y en la actualidad mantiene a tres de sus especialistas en transmisiones en Afganistán y a otros cuatro en Djibuti.

Desde las primeras participaciones del Ejército del Aire en misiones internacionales, la unidad ha estado presente en todas ellas, desde la base italiana de Aviano para intervenir en Yugoslavia, en 1995, hasta Lituania, Chad, Djibuti, Kirguizistán, Afganistán y la más reciente misión en Libia, con su participación desde Cerdeña.

Por su operatividad en la vigilancia del espacio aéreo, el Grupo ha intervenido igualmente en el control del espacio aéreo de los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, de los Campeonatos de Atletismo de Sevilla siete años más tarde, en campeonatos de Sierra Nevada y en cumbres, como la de la OTAN o la recién celebrada Iberoamericana en Cádiz.

El despliegue al que ha asistido Don Felipe ha sido similar al de una base aérea expedicionaria, con todo el operativo del GRUMOCA, desde los radares y la torre de control transportable hasta la equipación de camuflaje para tiendas y puestos de mando y control, custodiados por blindados armados con ametralladoras.

Al termino de la visita, dos cazas del Ejército del Aire han sobrevolado la base, un momento antes de que el alcalde de Sevilla Juan Ignacio Zoido, y la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, llegaran hasta el lugar del despliegue para saludar al Príncipe.