El Ayuntamiento de Sevilla ha puesto en marcha, a través de la Delegación de Urbanismo y Medio Ambiente, un proceso para renovar, en varias fases, la vegetación del Paseo Juan Carlos I, que se encuentra "en muy mal estado", en el marco de un proyecto de adecentamiento, acondicionamiento y mejora con el que se pretende "revalorizar la singularidad" de esa zona de la capital.
Según ha informado el Consistorio en una nota, este proceso de acondicionamiento ha comenzado en el tramo que va desde el Puente de la Pasarela hasta el Puente del Alamillo, para "recuperar 2,3 kilómetros de la margen izquierda del río" situados frente al antiguo recinto de la Expo 92, y desde el pasado mes de marzo, fecha en la que comenzaron los trabajos, se han plantado ya 80 cipreses de agua y otros tantos 'ginko biloba', una especie de árbol caducifolio de porte grande, con copa estrecha, algo piramidal y formada por uno o varios troncos que puede alcanzar 35 metros de altura.
Se trata, según el Ayuntamiento, de una especie muy longeva con valor ornamental por sus tonalidades amarillentas en otoño, sus escasas necesidades de riego y alta tolerancia a la contaminación. Junto a la especie principal, dará sombra al paseo, al tiempo que bajo su cubierta se podrá observar la lámina de agua del río.
Igualmente, en estos días se han plantado 50 cocoteros, mientras que el equipo de gobierno pretende respetar los pies existentes de adelfas, que, según ha explicado, en lo sucesivo se guiarán en estructura arbórea, lo cual dará "un toque distinguido y de floración" al conjunto.
El concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Maximiliano Vílchez, ha justificado estas actuaciones por la existencia en dicho paseo de "ejemplares que precisan de podas severas y plantas que están muy deterioradas", a la vez que ha adelantado la intención municipal de llevar a cabo en ese escenario otras actuaciones que actualmente están "estudiando", dentro del objetivo común de "poner a punto las zonas verdes de la ciudad y mantener en las mejores condiciones posibles el arbolado viario".
Al hilo de estas actuaciones, desde el Ayuntamiento recuerdan que el área de Parques y Jardines, en colaboración con el distrito Macarena, ha instalado un pipican en el Paseo Juan Carlos I, junto al puente de La Barqueta, respondiendo así a "una petición que los vecinos venían demandando desde hace tiempo".
Se trata de una nueva zona para perros de 1.600 metros cuadrados, dotada con un cerramiento antivandálico, bancos, papeleras y dispensadoras de bolsas para recoger los excrementos.
Además, se han realizado ya y se están podando y tratando con tratamientos fitosanitario preventivo más de 400 especies en el Paseo Juan Carlos I.