La Junta de Gobierno Local ha dado el visto bueno este viernes para iniciar los trámites para que las barriadas, plazas y zonas de la ciudad que se encuentran en un "limbo legal", al estar en suelo urbano consolidado pero gestionadas de manera privada por sus comunidades de propietarios y los propios vecinos, pasen a ser competencia municipal y se puedan prestar allí los servicios públicos tales como la recogida de basura, limpieza, alumbrado o de arbolado.
El delegado de Hábitat Urbano del Ayuntamiento hispalense, Antonio Muñoz, ha explicado este viernes que esta situación se da en muchas de las plazas, barrios o vías de todos los distritos de la ciudad y que se trata de un "problema enquistado" desde la década de los años 80, lo que provoca una "situación de desigualdad" al ser los propios vecinos de estas zonas y las comunidades de propietarios los que tienen que realizar las labores de conservación de los viarios, zonas verdes y el arbolado.
Así, y después de años con esta problemática, este viernes se ha dado cocimiento en la Junta de Gobierno Local de un informe del secretario del Ayuntamiento en el que se han fijado los trámites y la hoja de ruta necesaria para que se puedan recepcionar estas barriadas y urbanizaciones de la ciudad que cumplan con los requisitos establecidos. El Ayuntamiento se ha dado el plazo de un año para la recepción de estas zonas residenciales situadas en suelo urbano consolidado y que están integradas en la trama urbana de la ciudad, pero que en su día no fueron recepcionadas (hablamos del PGOU de 1987) y que se encuentran distribuidas por toda la capital en zonas como Alcosa, La Oliva, la Macarena, Santa Aurelia, Torreblanca, San Pablo o el Distrito Sur, por nombrar algunos ejemplos. En estas barriadas, calles o plazas, son los propios vecinos los que se encargan de la limpieza de sus zonas comunes, de arreglar los desperfectos o del propio arbolado, entre otros.
Para poder ser recepcionados por el Ayuntamiento y poder empezar a disfrutar de los servicios municipales estas zonas o barriadas tienen que estar ubicadas en suelo urbano consolidado, deben ser zonas comunes abiertas al uso público (no pueden ser urbanizaciones, plazas o vías cerradas) y deben existir elementos que acrediten que se prestan ya en ellos al menos algún servicio municipal (que aunque no sea oficial se haga de facto como puede ocurrir con el alumbrado o la recogida de basura).
Antes de iniciarse la recepción de estas barriadas, la Gerencia de Urbanismo, a instancias del secretario del Ayuntamiento, deberá elaborar un pama de la ciudad donde se recoja dónde están cada uno de los puntos a recepcionar.
Al pasar a ser de titularidad municipal y en el momento en el que ya se puedan prestar servicios municipales, esto supondrá un aumento del dinero invertido por la Hacienda municipal ya que estos servicios de conservación y mantenimientos será públicos.