Sonia Barea, la madre de los dos menores de 9 y 10 años de edad que fueron sustraídos por su exmarido y padre de los pequeños, un ex policía local de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), ha confesado este miércoles que estará "tranquila" cuando él ingrese en prisión, una vez que mañana éste pase a disposición judicial.
Así se ha manifestado la madre de los menores en una entrevista en Hora 25 de la Cadena Ser, recogida por Europa Press, en la que se ha mostrado "contenta" por tener a sus hijos "sanos y salvo", si bien ha señalado que está "a la expectativa" de lo que va a ocurrir este jueves, cuando su exmarido sea puesto a disposición del juez.
Ha confiado en que "lo manden a prisión y no lo dejen en libertad". "Estaré tranquila cuando ingrese en la cárcel", ha reiterado, alertando de que "no sabe dónde se va a meter si no es así".
La madre ha reconocido sentirse "desprotegida" durante el largo proceso judicial que lleva iniciado contra su expareja, quien ya fue condenado a dos años y diez meses de cárcel por maltratar y someter a "continuas" vejaciones a Sonia Barea en presencia de los menores, y cuenta con antecedentes por malos tratos, lesiones y daños.
En este sentido, ha criticado que el sistema judicial es "lento" y ha reconocido que, aunque "no veía luz ni escapatoria y se ha tenido que trasladar a otra ciudad y dejar a su familia para hacer una nueva vida con sus hijos", se consigue.
DECLARACIÓN POLICIAL
Este miércoles la Policía Nacional ha tomado declaración a Sonia Barea por la denuncia por la sustracción de los menores y por otras denuncias previas por malos tratos contra su exmarido, lo que ha retrasado la puesta a disposición judicial de éste, que finalmente comparecerá ante el juez en la jornada de este jueves.
Manuel Lebrón González será puesto a disposición judicial por presuntos delitos de sustracción de menores, atentado a la autoridad y lesiones después de que los agentes le detuvieran este martes en la vivienda de su actual pareja sentimental en la localidad de Dos Hermanas.
Un portavoz policial ya explicó que la investigación, liderada por la Policía Judicial, se inició a las 18,30 horas de este lunes, cuando la madre de los menores se personó en la Jefatura de Policía para denunciar la sustracción de sus dos hijos, y "culminó" sobre las 12,30 horas de este martes en la vivienda de la actual pareja del detenido con la localización de los menores, que ya fueron entregados a su madre.
EL DETENIDO SE "PARAPETÓ" TRAS SUS HIJOS
En este sentido, precisó que los agentes desplazados hasta dicha vivienda entraron en la misma "con la autorización de la mujer" y localizaron allí al detenido, que "en un primer momento" se "parapetó" detrás de sus hijos, de forma que los policías, "en primer lugar, pusieron a salvo a los menores", lo que se consiguió sin que sufrieran "ningún daño".
Seguidamente, y una vez que los niños ya estaban "a salvo", según expuso este portavoz policial, el detenido esgrimió un cuchillo de "grandes" dimensiones con el que agredió y hirió a tres policías, que ya han recibido el alta tras ser atendidos en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla por distintas heridas y cortes, mientras que los niños "están perfectamente y no han sufrido ningún tipo de lesión".
El detenido "estaba bastante agresivo" en el momento de su arresto, explicó a los medios de comunicación este portavoz de la Policía Nacional.
La Policía Nacional de Sevilla inició una investigación para localizar a los dos menores después de que su madre denunciara su desaparición tras habérselos entregado a su expareja el pasado 23 de diciembre, en virtud del régimen de visitas acordado por ambos, y después de que éste no los entregara una vez expirado el plazo de la visita, el pasado día 30, en el punto de encuentro acordado en Granada, residencia habitual de los pequeños.
Asimismo, la madre de los menores relató a la Policía que el padre "ha tenido varios problemas con la justicia" y que actualmente "tiene una prohibición de vivir e incluso acercarse" a Alcalá de Guadaíra, lugar donde tiene habitualmente su residencia.