El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo Moreno, y el rector de la Universidad Pablo de Olavide, Francisco Oliva Blázquez, han presidido este viernes el acto de formalización de la cesión de terrenos por parte de la UPO para la construcción del nuevo Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses de Sevilla. El evento ha contado también con la presencia del director del Instituto Nacional de Toxicología, Antonio Alonso Alonso; el viceconsejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local de la Junta de Andalucía, Alejandro Cardenete; la delegada del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Andalucía, María Sandra García Martín; el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano Sánchez; la vicerrectora de Relaciones Institucionales y Fundaciones de la Universidad Pablo de Olavide, Laura López de la Cruz; así como el director del Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses de Sevilla, Manuel Salguero.
La cesión de terrenos, de 6.460 metros cuadrados, se realiza mediante mutación demanial externa, y está orientada a la consolidación del área científico técnica al norte del campus de la UPO y a la mejora de las comunicaciones y el fomento de la actividad investigadora.
Campo ha agradecido la generosidad de la Universidad Pablo de Olavide, “una universidad joven y con solera, por lo mucho que está haciendo”, y ha resaltado la unión de esfuerzos entre la administración y la universidad “para dar al ciudadano lo que reclama, que es un centro de excelencia más moderno, seguro y habitable que, en definitiva, repercutirá en una sociedad más justa”.
Por su parte, el rector de la UPO ha puesto en valor el interés compartido de las instituciones por” la calidad, la excelencia y el trabajo riguroso, por el esfuerzo diario para transferir conocimiento a la sociedad” y ha apuntado las posibles líneas de colaboración que van a surgir con la materialización del proyecto: “Seguro que va a generar sinergias interesantes en el campo de la criminología, derecho, medicina legal o genética, mejorando la propia investigación en el campus y la docencia”.
De otro lado, Antonio Alonso ha resaltado la aportación para el desarrollo científico-técnico de esta cesión y el avance que supone para las ciencias forenses en Andalucía, pues el deterioro y la falta de espacio de las actuales instalaciones merma la posibilidad del desarrollo científico-técnico de esta sede andaluza del INTCF.
El INTCF es un órgano técnico adscrito al Ministerio de Justicia, que tiene como objetivo auxiliar a la Administración de Justicia y contribuir a la unidad de criterio científico y a la calidad de la pericia analítica, así como al desarrollo de las ciencias forenses y la toxicología.
El INTCF dispone de cuatro sedes en el territorio nacional -Madrid, Barcelona, Sevilla y La Laguna- que emiten en su conjunto anualmente más de 33.000 informes periciales a los distintos Tribunales de Justicia.
El Departamento de Sevilla del INTCF cuenta en la actualidad con una plantilla de 80 funcionarios de los Cuerpos Especiales del INTCF -42 facultativos, 20 técnicos especialistas de laboratorio, 18 ayudantes de laboratorio- que emiten anualmente alrededor de 7.000 informes periciales para atender a las CCAA de Andalucía y Extremadura.