El Sevilla tiene esta semana dos compromisos marcados en rojo en el calendario, la vuelta de los octavos de final de Champions League ante el Borussia Dortmund y el Gran Derbi del Sánchez Pizjuán. Después de encadenar tres derrotas consecutivas y de caer eliminado ante el Barcelona en las semis de la Copa del Rey, el conjunto de Lopetegui tiene que mejorar de forma inmediata.
Durante la mañana de este lunes, la plantilla viajará hasta Alemania, donde jugará el martes. El Sevilla entrenará por la tarde en el Signal Iduna Park, donde al día siguiente se jugará el pase de ronda en la Liga de Campeones.
El otro duelo de esta semana será el domingo ante el Real Betis. El conjunto nervionense recibirá al eterno rival en el Pizjuán. El equipo verdiblanco se ha convertido en uno de sus perseguidores, por lo que el Sevilla tendrá que ganar si quiere seguir manteniendo su distancia con los clubes que vienen por detrás.
Los resultados de la semana pasada han minado la moral del equipo, que ha visto cómo en apenas diez días se ha caído de la pelea por LaLiga Santander y cómo se le ha escapado el pase a una final de la Copa del Rey de una forma muy cruel.
Los dos partidos de esta semana son vitales a corto y largo plazo. Por un lado, pasar de ronda y vencer en el derbi supondría conseguir el objetivo de meterse en cuartos de Champions y lograr tres puntos muy valiosos. De no conseguir nada, el Sevilla se despediría de la máxima competición europea y prolongaría su mala racha en liga.
