El estadio de fútbol San Sebastián de Villaverde del Río (Sevilla) ha sido el escenario de un multitudinario altercado y una violenta pelea entre jugadores de la Unión Deportiva de dicha localidad y del Atlético Olivarense, hechos en los que habrían participado además numerosos espectadores, con el resultado de entre diez y 15 personas heridas.
Fuentes del servicio unificado 112 de Andalucía han informado a Europa Press de que con relación a dicho altercado, a las 20,10 horas se habrían recibido avisos respecto a una situación de "exceso de aforo" en el estadio, pues por ejemplo habría partes de las gradas "llenas" de espectadores para contemplar el encuentro entre la Unión Deportiva de Villaverde y el Atlético Olivarense.
Ya a las 22,15 horas, según el 112, varias personas alertaban de que el partido de fútbol había derivado en una pelea entre jugadores de ambos equipos, a la que se habían sumado espectadores del encuentro, con el lanzamiento de vallas y sillas y aglomeraciones de personas envueltas en la multitudinaria pelea, incumpliendo en todo momento las prevenciones esenciales contra la propagación del coronavirus Covid-19.
Incluso algunos alertantes narraban que los aficionados locales estaban impidiendo que los miembros del equipo visitante pudiesen abandonar las instalaciones, prolongándose la situación más allá del toque de queda de las 23 horas. Los alertantes daban cuenta de entre diez y 15 personas heridas, algunas de ellas con hemorragias y lesiones derivadas de impactos, siendo todas estas personas evacuadas por los medios propios de sus compañeros o amigos.
VÍDEOS DE LOS ALTERCADOS
Sobre los altercados circulan diferentes vídeos cuyas imágenes hablan por sí mismas, mostrando un nutrido grupo de jóvenes enzarzados en una refriega entre gritos y el lanzamiento de objetos como una valla de obras.
La Unión Deportiva de Villaverde ha indicado al respecto que para el partido, estaba "perfectamente controlado el aforo y la normativa de seguridad, con un 50 por ciento del aforo limitado" y un "escrupuloso control de los aficionados presentes en el mismo", extremo que según el club comprobaron efectivos de las fuerzas de seguridad media hora después de empezar el juego.
"Ante la presencia de un nutrido grupo de aficionados del equipo rival, conocidos como Ultra Olivos", según el club anfitrión, se decidió acotar la zona dispuesta para ellos en el estadio, señalando que este grupo "ya había anunciado en sus redes sociales previamente al partido, que se iban a producir disturbios".
INVASIÓN DEL CAMPO
El encuentro se estaba celebrando con normalidad, según la Unión Deportiva Villaverde, "hasta que el Atlético Olivarense metió un tercer gol y los jugadores se dirigieron a la zona del estadio donde se encontraba el grupo ultra del equipo", cuyos miembros habrían "invadido el campo saltándose el vallado perimetral sin respetar las indicaciones de la directiva y controladores".
Los miembros del citado "grupo ultra", según el club anfitrión, comenzaron a "agredir con vallas y sillas a los controladores de la UD Villaverde, resultando varios heridos con sangre entre los villaverderos" y derivando todo ello en "disturbios" y nuevas "agresiones físicas entre los controladores y directiva de la UD Villaverde".
El club, en ese sentido, ruega "tranquilidad y respeto a todas las aficiones, porque una cosa es la sana rivalidad en el terreno de juego, y otra son los graves incidentes que se vivieron" en el estadio.