La crecida extraordinaria del Ebro a su paso por Novillas, término municipal de la Ribera Alta donde este domingo ha alcanzado 8,5 metros de altura se encuentra ya en tendencia descendente.
La punta de la crecida va a llegar este lunes a las localidades de Pradilla y Boquiñeni.
El Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) ha convocado una reunión este mañana para analizar la situación, a la que asistirán el presidente del Gobierno de Aragón, la consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales, Mayte Pérez, y la delegada del Gobierno en Aragón, Rosa Serrano.
En la capital aragonesa el caudal del río ha alcanzado los 1.709 metros cúbicos por segundo y una altura de 4,71 metros, conforme los último datos de la CHE.
En el barrio rural de Alfocea el agua empieza a rebasar el nivel de la carretera de conexión con Monzalbarba, a la bajada del puente sobre el Ebro, según ha informado el Ayuntamiento. En la vigilancia de la zona se está colaborando con la Guardia Civil y con la Unidad de Pontoneros que van a balizar la carretera, de manera que mientras sea posible, se pueda atravesar con coches todo terreno en caso de emergencia.
Asimismo, se está detectando entrada de agua, de forma progresiva, en puntos habituales próximos al río, como Helios, Parque del Agua, huertos de Juslibol, parte baja de Vadorrey, arboleda de Macanaz y parque de la Cruz Roja, entre el puente Almozara y la pasarela del Voluntariado.
El Consistorio celebrará una nueva reunión en el Centro de Coordinación de Emergencias del Parque 1 de Bomberos.