La Policía nacional ha intervenido 1.650 cápsulas con cocaína camufladas en un cargamento de 20 toneladas de carbón vegetal que iban a ser distribuidas desde una nave industrial ubicada en la localidad madrileña de Moraleja de Enmedio, como ha informado la Jefatura Superior de Policía a través de un comunicado.
La operación se ha llevado a cabo en colaboración con la DEA estadounidense y la Agencia Tributaria. La droga era enviada desde Buenaventura (Colombia) en contenedores marítimos hasta el puerto de Valencia y posteriormente se enviaba para su apertura y distribución a una nave industrial ubicada en Moraleja de Enmedio, teniendo presumiblemente como destino final la ciudad de Denia.
Durante la operación se ha localizado y detenido a once personas, entre ellos al principal responsable de la trama e incautado un total de 50 kilos de estupefaciente. Además, se han efectuado cinco registros domiciliarios --dos en Madrid, uno en Leganés y otro en Moraleja de Enmedio--, donde se ha incautado dinero en efectivo, diverso material informático y documentación relevante para la investigación.
La operación comenzó el pasado mes de abril cuando los agentes tuvieron conocimiento de la presencia en España de un grupo organizado, integrado por ciudadanos de origen sudamericano, y cuyo propósito era la introducción de cocaína mediante contenedores marítimos.
Las primeras pesquisas tuvieron lugar cuando los investigadores lograron la identificación del responsable de la empresa encargada de traer los contenedores, ubicada en Moraleja de Enmedio.
Posteriormente los policías lograron constatar que dicha compañía ya había realizado con anterioridad un primer envío a finales del año pasado con el objetivo de confirmar la viabilidad de la ruta de entrada y del sistema de ocultación de la droga. Al parecer el destino final de la droga era la localidad de Denia.
Como continuación de la investigación los agentes averiguaron que la organización estaba preparando la introducción de un segundo envío de carbón vegetal con una cantidad indeterminada de sustancia estupefaciente en el interior.
Una vez que el contenedor llegó al Puerto de Valencia fue trasladado hasta la nave industrial que el grupo tenía en Madrid donde pretendían extraer la droga. Los narcotraficantes fueron sorprendidos mientras descargaban los sacos de carbón, momento en el que fueron detenidas un total de nueve personas, entre ellas el presunto responsable de la organización. Posteriormente fueron arrestados otros tres miembros de la banda.