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Málaga

Gámez censura que De la Torre se alinea con los radicales que pretendieron reventar los actos del Picasso

La portavoz lamenta que el PP haya dañado la imagen de la ciudad y califica la reacción del alcalde de “partidista” al hablar como militante y no como representante de la ciudad

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  • MARÍA GÁMEZ -PSOE

La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga, María Gámez, ha lamentado hoy el daño que ha producido a  la imagen de la ciudad el acoso a la presidenta de la Junta encabezado por el vicepresidente cuarto de la  Diputación y que hoy ha respaldado en declaraciones públicas Francisco de la Torre.

"La reacción de Francisco de la Torre ha sido partidista, ha hablado como militante y cargo del PP y no como alcalde de la ciudad. En un momento en el que estaban normalizadas las relaciones institucionales entre la Junta y el Ayuntamiento gracias al compromiso firme de la presidenta, basta pensar en el metro, De la Torre se alinea con los radicales de su partido", ha argumentado.

Gámez ha alertado de que si para el PP "el Museo Picasso  no tiene la suficiente importancia para estar al margen de la controversia política, es que han perdido el norte". "Lamentablemente pocos consensos tenemos, romperlos no es el camino", ha lamentado.


"Han tratado de empañar  un acto de gran relevancia para la ciudad como la celebración del décimo aniversario del Museo Picasso se acaba dañando la imagen de la ciudad. No había razones para trasladar una reivindicación a ese espacio. Cuando más focos había, con prensa internacional presente, recrudecen su estrategia de enfrentamiento y son capaces de llegar a hacerle un escrache a la presidenta Susana Díaz dentro de una plan meditado", ha declarado.

"Todo el capital de la marca de la ciudad, de la que tanto habla De la Torre, se dilapida. No vale viajar a Corea y apoyar a quienes no se comportan como representantes institucionales", ha agregado Gámez.

Para la portavoz socialista, no se debe reflexionar si se debe o no entregar una carta,  sino dónde, cómo, quién y en calidad de qué, y sobre todo si se trata de la continuación de un meditado plan que comienza preguntando por la habitación del hotel de la presidenta y sigue con un escrache. "No hay comparación posible", ha afirmado.

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