La situación que padece la desembocadura de del río Salado en Conil, ha llevado a al Ayuntamiento a pedir públicamente una solución "urgente" para su apertura al mar.
El alcalde, Juan Manuel Bermúdez, lamenta que "año tras año tengamos que vivir esta situación, incluida la muerte de peces por la falta de oxigeno y la Demarcación de Costas, que es la Administración a la que corresponde realizar el dragado de la desembocadura del río Salado no lo tenga en sus previsiones y siempre haya que estar en las mismas cuando se acerca el verano".
La acumulación de áridos en la desembocadura presenta en la actualidad un lamentable estado de estancamiento de sus aguas lo que está provocando la proliferación de algas y, por la falta de oxígeno, la mortandad de muchos peces que habitan en este río, según ha apuntado el propio Alcalde, "es absolutamente necesario proceder a una operación urgente de dragado en la zona final de la desembocadura y así garantizar la entrada y salida de agua al río sin problemas".
La Delegación Municipal de Playas ha enviado diferentes peticiones a la Demarcación de Costas y también se ha puesto en contacto telefónico con el Jefe de la Demarcación de Costa, trasladándole una vez más la urgente necesidad de dragar la desembocadura.
La preocupación municipal viene dada, a lo cerca que está ya la época estival y al estado en que se encuentra la desembocadura, prácticamente cerrada debido al cúmulo de arena en la misma, lo que dificulta la renovación del agua, ya que es muy difícil la entrada de agua del mar, y ello como en años anteriores ha llevado a la muerte de peces debido a la falta de oxígeno.
