En la alegría colectiva de la recuperación del estadio José del Cuvillo en la que ni por enmarañar ni el propio Ayuntamiento ha urgido sus manos, la noticia adelantada por este medio anunciando que el Recreativo Portuense delataba la actuación del Juzgado de lo Mercantil ante las mejoras que se vienen realizando en el estadio José del Cuvillo, no se han hecho esperar.
El Recre fue expulsado por la Administración Concursal del Estadio José del Cuvillo por estar utilizando dichas instalaciones fuera de convenio y de manera fraudulentaLa entidad racinguista respondió a este “ataque” sin fisuras y con una meridiana claridad ante lo que entienden ser una jugada sucia y más de un club nacido, fomentado desde el propio racinguismo y con no se sabe bien por qué motivos ni intereses movidos.
Lo cierto es que el Racing ha vuelto a la competición, el estadio se abrirá más pronto que tarde y su participación en la Segunda Andaluza (falta oficializarlo), a una del Recre, parecen que pudieran incomodar y en cierto modo asustar en una vertiginosa escalada.
El Racing ha vuelto y eso no todos lo llevan por igual. Encima lo entrenará un entrenador que no terminó, precisamente, bien tras el trato dispensado después de ofrecer los mejores años, sin duda, al club.
Si hay otras cuestiones o intereses menos claros por los que el Recre se pronuncie al respecto y sea velador del patrimonio ajeno, del que sigue siendo acreedor la entidad racinguista, no ha quedado bien claro en que tome ese partido y más de un club con el que federativamente no tiene ya lazo alguno. El Racing se defiende y lo hace con datos contrastados.
“El Estadio José del Cuvillo está cedido por el Ayuntamiento de El Puerto de Santa María al Racing Club Portuense hasta el año 2041”, dice. Su intención de redimir, la que tanto parece molestar a la directiva recreativista, es “recuperar un patrimonio que es de todos los portuenses” y que no cejará en “seguir trabajando”.
Desde el club racinguista “rechazamos y mostramos nuestra total repulsa a este ataque llevado a cabo por el club Recreativo Portuense” ante “argumentos inverosímiles e inciertos”, aseguran.
El Racing no se muerde la lengua. “Es completamente incomprensible la actitud del club Recreativo Portuense, que no contento con utilizar de forma fraudulenta y manipulado el legado del Racing Club Portuense y haberse nutrido del trabajo, de la historia, de nuestros símbolos y colores y del nombre del racinguismo para crecer, ahora que el primer equipo de la ciudad vuelve a estar compitiendo, intentan asestar un ataque más al Racing”.
Es por ello que “desde el Racing Club Portuense se quiere aclarar que el club Recreativo Portuense fue expulsado por la Administración Concursal del Estadio José del Cuvillo por estar utilizando dichas instalaciones fuera de convenio y de manera fraudulenta, al tratarse de otro equipo distinto al Racing Club Portuense y en virtud al acuerdo de cesión entre el Ayuntamiento de El Puerto”.
¿A qué intereses defiende el Recre?
La acción llevada a cabo por el Recreativo Portuense y anunciada en exclusiva por este medio, no ha dejado a nadie indiferente ante las dudas que despierta el inusitado interés en querer denunciar la acciones que se vienen realizando en el estadio racinguista. Un club que tras dejar de jugar en él consiguió, a diferencia de otros clubes con más entidad, número de fichas y con más historia, unas instalaciones para el disfrute propio.
Por eso los aficionados en general han mostrado su rareza en conocer los motivos que han llevado a la entidad a ser tan vigilante cuando a ella poco o nada le afecta.
Al contrario, alivia en parte la saturación de equipos en las exiguas instalaciones. Recordar que el Recre fue filial del Racing cuando a éste se le empezó a atosigar judicialmente. ¿Quién y qué se gana en esta batalla civil?