Un penalti polémico de Calderón a Javi Tamayo en el 44' de la primera mitad -el árbitro no lo concedió en un principio, rectificando su decisión posterormente a instancias de juez de línea-, que detuvo con apuros y acierto el guardameta del Arcos Lebrón, permitió a los de Bolli marcharse al descanso con un gol de ventaja (0-1) materializado por Narváez en propia meta al intentar cortar un centro de Calderón en el minuto 11, dio paso a una segunda parte en la que los conileños le dieron la vuelta al marcador en una extraordinaria actuación de su delantero Carlos Cuenca, autor de los dos goles de su equipo.
No obstante, los arcenses se fueron en busca del empate y, ya en el descuento, unas manos de Manu Lebrón fueron penalizadas con penalti por el colegiado ceutí Alcaraz Yáñez, encargándose de batir a Fran el capitán del Arcos Maqui, que no desaprovechó la ocasión para subir el segundo gol visitante al marcador, dejando al Conil con la miel en los labios y obligándole a tener que disputar la liguilla de la fase de permanencia, en una jornada en la que todo estaba preparado en el Pérez Ureba para festejar el logro del objetivo de los de Lázaro Canto, algo que, por el momento, tendrá que esperar.