“Bien podrán los encantadores quitarme la ventura, pero el esfuerzo y el ánimo será imposible” decía el Quijote a su escudero Sancho tras una de sus delirantes batallas. Del mismo modo actuó ayer Rubén Muñoz, el funcionario del Cuerpo Nacional de Policía que fue condenado a seis años de prisión e indultado parcialmente en septiembre del pasado año, tras pasar un año en la cárcel.
Con el apoyo del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Rubén Muñoz, está empeñado en recuperar su vida a pesar de las cornadas que el destino le asesta desde 2007. La secretaria general del SUP a nivel nacional, Mónica García y sus homónimos andaluz y jienense, Manuel Expósito y José Olivares, respectivamente, presentaron ayer la campaña “Solidarízate, ayuda a Rubén” con la intención de recaudar fondos para que el joven policía, aún en excedencia, a la espera de la decisión de la Dirección General de la Policía. “Con que cada funcionario (en referencia a la Policía Nacional) ponga un euro Rubén podría pagar la indemnización”.
Situación límite
Rubén Muñoz vive con su mujer y su hija de un año en casa de su suegra. Cobra 426 euros y debe hacer frente a una indemnización de 45.000 euros, que va satisfaciendo a 450 euros al mes. Así será durante los próximos ocho años. Sin poder reincorporarse a su plaza de policía y con los recursos familiares muy mermados, el joven podría volver a la cárcel si no paga. A pesar de haber solicitado una cuota menor, la Justicia se la ha denegado. “No hemos venido aquí a cuestionar ni a la Justicia ni las sentencias de los jueces. Pero la Justicia no es infalible y comete errores”, recalcó en varias ocasiones el secretario general del SUP en Jaén, José Olivares.
De este modo, sus compañeros del sindicato han abierto una cuenta en el Banco de Santander para ayudarlo. El número es: ES97 0049 1743 08 2190033641.
Rubén Muñoz sigue defendiendo y luchando por demostrar su inocencia. Fue condenado a seis años de prisión por un delito de lesiones graves, porque supuestamente un hombre perdió la visión de un ojo en una pelea ocurrida en un salón de bodas en septiembre de 2007. Según recordó Olivares, Rubén acudió a poner paz en una disputa tras la que finalmente fue acusado de haber provocado las lesiones del demandante. “Fue condenado a seis años de prisión injustamente solo con la declaración del denunciante”, reza la publicidad que a nivel nacional difunde el SUP para recaudar fondos. De hecho, Rubén Muñoz nunca quiso aceptar el indulto completo ya que de haber sido así no podría demostrar que él no fue el agresor y que nada tuvo que ver con el delito por el que le condenaron.
