Los ruidos de las máquinas delaula de formación de IES Las Salinas han sido denunciados por enésima vez "ante la pasividad de las administraciones públicas en solucionar mi caso". Stacey Mures Torrejón lleva años denunciando, tanto a la Junta de Andalucía como al Ayuntamiento de San Fernando, el alto nivel de ruido que sufre la zona en la que vive, un ruido que procede de la maquinaria industrial con la que se imparten las clases prácticas profesionales en el centro de enseñanza. Los ruidos se inician en el 2016 a consecuencia del funcionamiento de los sistemas de extracción y aspiración de los módulos formativos y cursos que la Junta de Andalucía imparte en el citado instituto.
"Mis denuncias, que comienzan desde ese mismo año, consiguieron que la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía realizara una medición de la contaminación acústica de la zona, aunque entre las denuncias y la medición transcurrió un año, dando niveles superiores a los permitidos para un espacio residencial ya que rozaba el máximo de zona industrial".
Esto derivó en una orden de paralización de la maquinaria, que tardaron en realizar un mes y medio, desde el 7 de marzo que llegó el informe acústico hasta el 28 abril que hicieron la pertinente paralización y hasta la adopción de las medidas correctoras necesarias para rebajar los niveles de ruido a lo que permite la ley. La delegación territorial de Educación pidió, de hecho, al IES Las Salinas que no hiciera uso de las turbinas y los sistemas de extracción que dan servicio a los módulos de carpintería metálica y de madera que se imparten en el centro hasta solventar este problema.
"No obstante, la maquinaria ha vuelto a ponerse en funcionamiento provocando nuevamente un ruido insoportable que me impide desarrollar mi vida cotidiana con normalidad, haciendo que reaparezcan más frecuente mis migrañas debido al estrés y ansiedad que me provoca el ruido continuo y, especialmente, damnificada en estos momentos al encontrarme preparando una oposición".
Ahora, la administración "me exige que para demostrar que no se han adoptado las medidas correctoras adecuadas, realice una nueva medición acústica que desvele el nivel de ruido que padezco", dice Mures Torrejón. "No es justo que tengamos que seguir soportando esta situación y que las administraciones me obliguen, una y otra vez, a certificar el origen de un problema que es más que evidente. El problema no se ha solucionado, al menos eficazmente. Por ello he pedido al Ayuntamiento de San Fernando, sin respuesta alguna, que actúe de oficio, con celeridad en este problema".
Al seguir sin recibir contestación por parte de la administración, Stacey Mures Torrejón se ha visto obligada a recurrir al Defensor del Pueblo Andaluz, explicándole su situación "en la que me tienen estas administraciones públicas, y que no recibo solución ni respuesta alguna del Ayuntamiento de San Fernando".
"Pongo toda esta información en manos de los medios de comunicación porque necesito que se sepa lo que hace el Ayuntamiento de este municipio con sus ciudadanos, y que tenemos que llegar al “Defensor del Pueblo Andaluz” para poner en su conocimiento esta situación y se agilice esta situación", dice Mures Torrejón.
