La Fiscalía Provincial de Sevilla ha solicitado penas superiores a 20 años de cárcel a una organización criminal formada por cuatro familiares de origen rumano afincados en la capital hispalense por perpetrar delitos relacionados con el narcortráfico, los robos con violencia o la tenencia ilícita de armas, entre otras.
En el escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público pide para Calin L. y Alexandru L. una pena de 21 años y ocho meses de prisión por la comisión de hasta seis delitos. En concreto, se les acusa de ser autores de un delito de robo con violencia, de un delito de lesiones, de un delito contra la salud pública, un delito de tenencia ilícita de armas, un delito continuado de receptación y un delito de pertenencia a grupo criminal. Además, indica que a Calin L. le concurre la circunstancia agravante de reincidencia.
Igualmente, el Ministerio Fiscal reclama para Dafinel L. una pena de 23 años y dos meses de cárcel por considerarlo autor de los delitos de robo con violencia, lesiones, contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, receptación continuada y pertenencia a grupo criminal. Además, indica que a Dafinel L. le concurre la circunstancia agravante de reincidencia.
Asimismo, la Fiscalía pide para un cuarto miembro, Boby L., una pena de ocho año y ocho meses de cárcel por un delito de tráfico de drogas y otro de pertenencia a organización criminal. A todos los acusados les concurre la circunstancia agravante de abuso de superioridad.
Cabe destacar que los cuatro acusados están en situación de prisión provisional y en el caso concreto de Calin L. y Dafinel L. ambos han sido condenados penalmente en anteriores procesos. Así, el primero fue condenado a dos años de prisión por un delito de robo con violencia e intimidación mientras que el segundo fue condenado a un año y medio de prisión por un delito contra la salud pública.
En la exposición de los hechos, el Ministerio Público señala que sobre las 22,00 horas del 19 de noviembre de 2017, todos los acusados, "previamente concertados en el común designio y en compañía de otras personas no identificadas", se personaron en el domicilio de una compatriota rumana para reclamar el pago de una deuda que había contraído el hermano de ésta.
Así, la Fiscalía, tal y como continúa en su relato, señala que como no consiguieron obtener el dinero reclamado "al no encontrarse" en la vivienda su hermano, y "con la intención de obtener un inmediato e ilícito beneficio patrimonial", los cuatro acusados "valiéndose de diversos objetos contundentes tales como una barra de hierro, una defensa extensible y una pistola" comenzaron a golpear a la mujer al tiempo que lograban apoderarse de 800 euros en metálico que se encontraban en la vivienda. Esta agresión le produjo a la perjudicada una fractura nasal y laceraciones y otras heridas y por lo cual necesitó tratamientos quirúrgico.
Posteriormente en febrero 2018, el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla dictó una orden de registro en los domicilios de los acusados, todos ellos situados entre la Avenida de San Lázaro y Avenida de Pino Montano de la capital hispalense, donde se pudo intervenir 18.550 euros, 165 gramos de cocaína --que habría alcanzado el precio de 15.000 euros en el mercado ilícito--, una pistola eléctrica tipo 'Táser', así como enseres como teléfonos móviles, aparatos electrónicos y joyas que "los acusados con la intención de obtener un ilícito beneficio patrimonial adquirían a personas cuya identidad se desconoce, por un precio muy inferior al del mercado y a sabiendas de su ilegal procedencia".
Con todo, la Fiscalía indica que los acusados, que serán juzgados este miércoles por la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Sevilla, "desde tiempo indeterminado y hasta la fecha de su detención", se dedicaron a planificar y ejecutar "una diversidad de actos ilícitos" que iban desde la venta ilegal de estupefacientes a la compra de efectos provenientes de actos delictivos previos.